La SGAE vuelve a la carga y en un mes presenta 77 reclamaciones

Dolores Cela Castro
dolores cela LUGO / LA VOZ

LUGO

Los informativos de las televisiones están sometidos a derechos de autor, por la música.
Los informativos de las televisiones están sometidos a derechos de autor, por la música.

La mayoría de ellas fueron en diciembre, coincidiendo con Navidades

09 ene 2014 . Actualizado a las 07:08 h.

La SGAE ha dado por finalizado el plazo para lavar su imagen, después del escándalo Teddy Bautista y de los miembros de su ejecutiva, que fueron investigados en el año 2011 por presuntos delitos de desviación de fondos y apropiación indebida. Lo hizo con la presentación en un mismo mes de 77 reclamaciones a locales de todo tipo a los que les pide que paguen el canon por los derechos de autor de la música que se escucha en sus instalaciones. Sirven todos los acordes. Ya pueden ser los de los informativos o los de los anuncios del turrón y las colonias. Medio centenar de estas reclamaciones se registraron en un mismo mes, el de diciembre, y la mayoría de ellas en los últimos días, coincidiendo con las fiestas navideñas.

De la persecución de la sociedad, en cuyos estatutos fundacionales figura la defensa del autor como primer eslabón de la cadena de valor de la creación, no se libra nadie. El filón recaudatorio, que afectó en la anterior etapa a concellos como los de Lugo y de Vilalba, por la música de las orquestas y conciertos durante las patronales y que extiende sus tentáculos a peluquerías, bares e incluso supermercados, lleva a la SGAE a presentar reclamación judicial, en el Juzgado Mercantil, a través de los denominados procedimientos monitorios para cobrar deudas inferiores a los 30.000 euros.

La mayor parte de los procedimientos no llegan a juicio, porque las partes arreglan en la fase previa a la vista. No dar el paso siguiente supone un ahorro en intereses, costas e incluso está contemplada la posibilidad de fraccionar el pago, con lo que los afectados acaban claudicando y pagando lo que en ocasiones se ha denominado «impuesto revolucionario». Con ello evitan también la posibilidad de que el asunto finalice en un embargo.

Con detectives

La SGAE cuenta con una potente maquinaria de asesores jurídicos e incluso detectives privados para localizar a aquellos que no pagan el canon. Los investigadores trabajaban incluso los fines de semana, sin reparos a la hora de irrumpir en bodas y banquetes en los que, lógicamente sonaba la música para amenizar a los invitados.

Las advertencias de algún local, por escrito, a través de carteles dirigidos a los inspectores de la sociedad, en el sentido de que lo único que se ponía de la televisión era el telediario, no colaron.

La sociedad levantó el pie del acelerador a raíz de la investigación judicial que supuso el registro de su sede de Madrid y la detención de su presidente y de otros directivos. Pero ahora, a juzgar por el volumen de reclamaciones presentadas, vuelve de nuevo a la carga con aires renovados. Antes de la crisis interna se hablaba de que instaba en España alrededor de 4.000 procedimientos.

crónica el canon por los derechos de autor