«La gente es lo mejor que tiene el campo para su progreso»

Benigno Lázare LUGO/LA VOZ.

LUGO

Una de las personas con más experiencia en Lugo echa por tierra el inmovilismo de la población del medio rural

04 sep 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Charlar con el veterinario Luciano Sánchez es un buen tratamiento contra la depresión posvacacional. Con su figura menuda y de aspecto franciscano, desprende tanto optimismo que uno, como Frank Capra, piensa, ¡qué bello es vivir!, y comienza la jornada laboral con ímpetu renovado.

Ese entusiasmo también hizo mella hace muchos años en los diputados de una de las primeras legislaturas del Parlamento de Galicia. Cuando ocupó la Dirección General de Producción Agropecuaria, el conselleiro de turno le encasquetó la defensa de un macroproyecto que costaba 7.000 millones de pesetas en siete anualidades. Como lo había elaborado, lo expuso tan detallada y convincentemente que sus señorías lo aprobaron por unanimidad. Además, la Administración puso el dinero comprometido y el resultado fue que Galicia se subió a la locomotora del tren europeo de la selección genética.

Luciano pertenece a un grupo de leoneses que hicieron la carrera en la facultad que tenían a la puerta de casa y que recalaron en Galicia porque les gustaba la profesión y aquí había campo en abundancia. Salvo por el acento de su pueblo natal de Valderas, que conserva intacto, su integración en Lugo fue total. En sus frecuentes viajes al extranjero ubica a sus interlocutores señalando que vive en una pequeña ciudad del noroeste de la península Ibérica, en la que se vive muy bien y que, por carecer, ni tiene contaminación.

Pertenece desde muy joven al Cuerpo Nacional de Veterinarios y llegó a Lugo tras una breve estancia en Canarias. Vino con la misión de transformar la Estación Pecuaria y llevar desde aquí la transformación del sistema de inseminación artificial en Galicia. Estuvo un año especializándose en Francia y llegó para generalizar el uso del semen congelado. «Hoy ese centro de reproducción es Xenética Fontao, que probablemente sea el mejor de España».

Investigación, docencia y la colaboración con la asociación de criadores Acruga, ocuparon la mayor parte de su vida profesional. Fue el segundo decano de Veterinaria de Lugo, dirigió 28 tesis doctorales y ahora está jubilado de la docencia pero sigue acudiendo a las instalaciones del campus a diario porque, con otros profesores, participa en una sociedad de investigación. Por supuesto, sigue colaborando intensamente con Acruga, es vicepresidente de Caixa Rural, muy vinculada con la ganadería, e incluso últimamente se permite el lujo de disfrutar de una partida de dominó en el Círculo.

El paréntesis político de Luciano Sánchez duró media docena de años, a razón de casi un conselleiro por año. «En aquella época era un cargo muy técnico y teníamos mucha libertad de actuación», o sea que tampoco se sintió frustrado en ese período.

Uno de los seis conselleiros que tuvo se interesó por la puesta en marcha de las denominaciones de origen de los vinos, y este lucense de adopción se encontró con uno de los sectores más dispuestos a innovar. Lo mismo ocurrió con los ganaderos en general, que en pocos años pasaron de pequeñas explotaciones a importantes granjas, y de vacas cruzadas a ejemplares de rubia gallega que tienen éxito en medio mundo.

«No tengo duda de que la gente es lo mejor que tiene el campo para su progreso, con ganaderos muy profesionales y pacientes, con una experiencia grandísima incluso cuando tenían cuatro vaquitas». Al margen de la incapacidad para comercializar los lácteos y la carne directamente, dice que el gran problema del campo sigue siendo la insuficiente concentración parcelaria. «En A Pastoriza se hizo una concentración total de las parcelas y hoy es el municipio con el mejor ganado de Europa», concluye Luciano.