Rúa da Raíña
08 jun 2007 . Actualizado a las 07:00 h.La Cofradía del Capón de Vilalba se presentó ayer en Lugo con un almuerzo en el Restaurante Alberto, en el que su propietario, Alberto García , fue incorporado al ilustre organismo como socio de honor. Hizo las funciones de gran maestre el abogado vilalbés afincado en Madrid Domingo Goás , que es quien promueve los actos de la cofradía, con el único fin de dar a conocer el exquisito manjar que es el capón de Vilalba. Le impuso la banda de la cofradía y el pin de oro a Alberto García, en presencia del alcalde de Vilalba, Gerardo Criado ; varios concejales; el ex presidente del Parlamento de Galicia, García Leira ; el presidente de Caixa Galicia, Mauro Varela , el empresario Vicente Quintas , entre otras personalidades y numerosos periodistas que acudieron a la presentación. Domingo Goás explicó que la cofradía ya ha realizado este año 12 almuerzos por toda Galicia para promocionar el capón de Vilalba y que todavía le queda uno más en A Coruña y dos en Madrid. Tal como explicó antes del almuerzo Goás, «No compro ni vendo capones, sólo invito a los amigos a comerlos para promocionar este producto. Y cuando invito es a comer, no a raspar». Y damos fe que así fue. Fue una opípara comida a base de capón, y un placer compartirla con el ameno anfitrión. Festival de danza La academia de danza Star Dance celebra periódicamente sesiones públicas en las que queda patente la pericia de los alumnos en lo del baile. El pasado sábado celebró el festival de fin de curso en el auditorio Gustavo Freire, que además de muy entretenido y vistoso, resultó muy concurrido porque, ya se sabe, padres, parientes de todo tipo, amigos y aficionados suelen acudir en masa a presenciar estos espectáculos. Este centro ofreció con gran éxito una exhibición en el recinto histórico durante las últimas fiestas de San Froilán (como diría un miembro del jurado de los concursos que se celebran en televisión, se nota que se divierten bailando). La tarde de ayer empezó soleada y acabó con algo de tormenta, pero en Outeiro de Rei empezó y acabó con diversión. La causa que explica ese estado de ánimo colectivo fue la fiesta infantil organizada por el concello, que fue todo un éxito de asistencia. Se rebasaron ampliamente los 200 chavales, lo que supuso una de las ediciones más concurridas, según comentaba al final el alcalde, José Pardo Lombao . Hubo merienda y un final un poco antes de lo previsto por unas gotas de lluvia, aunque con la sensación de haber pasado un rato muy agradable. El concello trabaja ahora en la preparación de las actividades de un verano que ya llama a la puerta.