Alcoa quiere ahora gas natural para producir electricidad en San Cibrao

La Voz S.S. | VIVEIRO

LUGO

PEPA LOSADA

La Xunta paralizó en 1999 el ramal hasta la factoría por el desinterés de la multinacional El Estado aún no se ha pronunciado sobre la petición de acercar el gasoducto a la fábrica

17 mar 2007 . Actualizado a las 06:00 h.

?a pronta liberalización del mercado de la electricidad en España ha llevado a Alcoa a replantearse su interés por el gas natural como fuente energética. Ocho años atrás, la anterior Xunta justificó la paralización del proyecto para acercar el gasoducto a San Cibrao por el desinterés de la multinacional. En una confirmación de su apuesta por mantener la actividad en A Mariña, Alcoa ha solicitado a Enagás, el operador del sistema nacional, la construcción de un enlace hasta esa fábrica. Todavía no ha trascendido la decisión del Ministerio de Industria sobre una petición que también incluye la incorporación del ramal a la planificación energética nacional. El consumo eléctrico representa alrededor del 40% de los costes de producción de Alcoa San Cibrao. La Unión Europea investiga a España por considerar ilegales las tarifas eléctricas aplicadas a grandes consumidores. Aunque Estado, Xunta y la propia multinacional sostienen que sobran argumentos para demostrar que no caben sanciones porque no hubo subvenciones públicas y no se distorsionó el mercado, la amenaza de multas millonarias ha desatado las alarmas. Tanto, que, por primera vez, en la conciencia ciudadana cobra visos de realidad la posibilidad de cierre de la factoría. Proyecto desestimado En su última visita a la fábrica de alúmina aluminio de San Cibrao, José Ramón Camino de Miguel, presidente de Alcoa España, eludió pronunciarse sobre la opción del gas natural como alternativa para abaratar costes energéticos en la factoría mariñana y apostó por un sistema mixto de generación. Ahora que ha trascendido la petición de llevar hasta San Cibrao un ramal del gasoducto Vilalba-Llanera, cobra actualidad el argumento esgrimido por la Xunta que regía el PP en 1999 para explicar la paralización de ese proyecto. Hacía pocos meses que Alcoa había adquirido una empresa que hasta entonces pertenecía al Estado español, que a través de Inespal sí había manifestado su deseo de emplear gas natural. La multinacional también lo quería, pero siempre y cuando no representase ningún esfuerzo añadido y su coste fuese inferior al de la energía eléctrica. Por tratarse del mayor consumidor potencial, su interés resultaba determinante. Desde el PPdeG explicaron entonces que la propia fábrica de aluminio y, por extensión, la comarca, se quedaban sin opciones de gas natural porque a Alcoa no parecía atraerle en aquel momento esa fuente energética como alternativa. Pocos meses después, desde el PSdeG-PSOE confirmaban que la Xunta había desistido. El nuevo escenario La situación ha cambiado. El detonante parece haber sido la amenaza de multa, aunque el presidente de Alcoa España ya desveló en San Cibrao que trabajan con el objetivo de propiciar «una transición ordenada hacia el mercado libre» de la electricidad en España. En un mensaje repetido por los sindicatos, José Ramón Camino admitió que la investigación de la UE «preocupa», aunque cree «prematuro» hablar de la posibilidad de deslocalización. Ahora, agregó, la situación no es «dramática», pero el reto estriba en conseguir costes energéticos que permitan mantener la competitividad cuando se liberalicen los precios de la electricidad en España. Subrayó que Alcoa tiene intención de continuar produciendo en San Cibrao.