Dos de los momentos más destacados de la concentración de ayer en Vilalba fueron la entrada y la salida de los representantes sindicales en las oficinas de Lactalis, en donde se reunieron con el director de la factoría. Había curiosidad por saber lo que se había comentado, por lo que las palabras de los responsables sindicales se escucharon con atención, sin que faltase algún aplauso espontáneo por el medio de las intervenciones. José Rodríguez, de Unións Agrarios, destacó que los sindicatos están ahora «máis unidos ca nunca», y clama contra la leche que se ofrece en los supermercados a bajo precio: «Hai que evitar -dice- que se venda o litro de leite por debaixo de 39 ou 40 céntimos». Xabier Gómez Santiso, del Sindicato Labrego Galego, proclama que la jornada «é só un primeiro paso» de una campaña reivindicativa. ¿Qué se reclama? Que los productores de leche de Galicia «queren seguir vivindo do seu traballo». Juan Pérez, de Xóvenes Agricultores, afirma que las distribuidoras tienen también su parte de responsabilidad en la situación. Y en un área comercial de Lugo, la que Carrefour tiene a orillas del Miño, siguió después la protesta. En el hipermercado En el centro comercial lucense se vivieron momentos de máxima tensión, ya que los ganaderos aseguraban que en este hipermercado se vendió durante varios días de esta semana el litro de leche de algunas marcas a precios inferiores a 0,50 euros. Alrededor de un millar de ganaderos, acompañados por los sindicalistas, instaron a la empresa a retirar aquellas marcas que se comercializaron esta semana a 0,40 y 0,45 euros porque entienden que «é unha vergoña». Aunque después de tirar varias cajas de leche por el suelo muchos pretendían entrar en el almacén para comprobar si había más producto de las mismas marcas, la mediación de los líderes sindicales y de las fuerzas de seguridad permitió controlar la situación. Los ganaderos manifestaron la necesidad de mantenerse unidos ante esta situación de crisis.