El científico compostelano es el principal responsable de la estación biológica que la Universidade de Santiago proyecta construir en plena sierra
28 dic 2002 . Actualizado a las 06:00 h.La carrera científica de Javier Guitián está estrechamente ligada a las montañas lucenses y en especial a la sierra de O Courel, cuyo medio natural estudia continuamente desde 1981. En aquella época, en colaboración con el también biólogo y profesor Javier Amigo, elaboró el estudio más exhaustivo sobre la vegetación de O Courel realizado hasta entonces. En la actualidad está al frente del proyecto de creación de una estación de biología que la Universidade de Santiago y la Asociación Río Lor tienen previsto construir en Seoane do Courel. En este centro participará también el Instituto de Biodiversidade Agraria fundado recientemente en el campus de Lugo. -¿En qué estado se encuentra hoy la investigación biológica de la sierra de O Courel? -En cuanto a fauna y vegetación, hoy tenemos una información bastante completa. Están catalogadas prácticamente todas las especies que existen en la zona. Pero O Courel tiene muchísimo que investigar todavía: relaciones entre plantas y animales, dispersión de frutos y semillas, procesos de polinización, evolución de las poblaciones vegetales y animales.... Hay campo suficiente para investigar toda una vida y no sólo en el terreno de la biología vegetal y animal. La sierra también ofrece un gran interés para los geólogos y los especialistas en geografía humana, entre otros. -¿Por qué se escogió O Courel para crear una estación biológica y no Os Ancares, por ejemplo? -Porque la sierra de O Courel tiene una diversidad biológica y paisajística mucho mayor. A su lado, la sierra de Os Ancares parece un lugar uniforme. En O Courel hay importantes áreas de terreno calizo, por ejemplo, y en Os Ancares no. Es una zona donde se entremezclan los ecosistemas de tipo cantábrico y los de tipo mediterráneo, por lo que posee una gran originalidad y ofrece un enorme interés científico. La Universidade de Santiago ya tiene un centro de investigación biológica en Ferrol, dedicado a la biología marina. Ahora se trata de crear un centro para estudiar la biología de montaña y se decidió que O Courel es uno de los espacios más interesantes para un proyecto de este tipo. En Galicia no hay muchos lugares donde exista tanta variedad natural -¿Cuánta gente trabajará en la estación? -Según el proyecto, la estación tendrá ocho plazas de residencia para investigadores y dieciséis para alumnos. Esas plazas estarán ocupadas de forma prácticamente continua. También está previsto que venga gente de otras universidades españolas y extranjeras. Ahora mismo tenemos un proyecto conjunto de investigación en el que colaboran la Universidad de Jaén y la Estación Biológica de Doñana y que se refiere a la vegetación de O Courel. Además, la estación podría acoger anualmente los cursos universitarios de verano que ahora se desarrollan cada dos años en Seoane. -Parece que la Asociación Río Lor puede tener problemas para financiar la parte que le corresponde en este proyecto. -El problema es que Río Lor tendrá menos fondos de los esperaba recibir en el plan Leader Plus y puede tener dificultades para pagar la parte que le toca. No obstante, yo confío en que encuentre una solución y en que cumpla el compromiso que firmó con la universidad para llevar a cabo este proyecto. -¿El aislamiento de O Courel ha ayudado a conservar su patrimonio natural? -Sin duda alguna. Las dificultades para acceder a la sierra tienen su lado malo y sus habitantes aún padecen hoy esos problemas. Pero el lado bueno del aislamiento es que la naturaleza se ha podido conservar mucho mejor que en otros lugares. Desde que empecé a investigar en O Courel no ha habido muchos cambios, al menos en la zona más sensible desde el punto de vista biológico, que es la parte alta de la sierra. Donde sí hubo un cambio radical es en las áreas afectadas por las explotaciones pizarreras, pero las zonas más fastidiadas por esta actividad son las que presentaban menos interés desde el punto de vista ecológico. -¿Cómo ve el futuro de O Courel y de la montaña lucense en general? -La situación medioambiental, económica y demográfica de estas zonas no es nada satisfactoria, pero yo creo que va a llegar un momento en que alguien se dará cuenta de que por este camino no se va a ningún sitio. En la Administración alguien tendrá que tomar las riendas para poner en marcha un plan global de recuperación y conservación de las áreas de montaña. Lo que haría falta es un plan que englobase las zonas de montaña de Galicia, León y Asturias, para lo que tendrían que cooperar varias comunidades. En el caso concreto de la sierra de O Courel, hay alguna zona que ya es irrecuperable, como la de Pacios da Serra, pero creo que si se hacen bien las cosas aún estamos a tiempo de salvar lo más importante del patrimonio natural.