Un grupo de dieciséis chicos de diferentes nacionalidades -Estados Unidos, Francia, Dinamarca o España- participan estos días en un campamento de trabajo en el río Rato. Se trata de una experiencia que organiza la Consellería de Familia con el objetivo de fomentar la educación medio ambiental entre la juventud. Los visitantes realizarán trabajos de inventariado de especies arbóreas, crearán mobiliario ecológico y limpiarán la suciedad que hay en las riberas de los ríos Rato, Fervedoira y Miño. A lo largo del verano habrá cuatro tandas con chicos de distintos países europeos. Celia, una chica de Nueva York de 22 años, destacó que el paisaje gallego «es muy hermoso», y señaló «la ambilidad de la gente de Lugo». Genma, de Barcelona, calificó el campamento de «una recompensa, porque todo lo que sea cuidar el medio ambiente es positivo». El más simpático del grupo era un danés, Edwin, que con su escaso castellano destacó la belleza de Galicia y la antigüedad de Lugo. Además de las labores educativas con la naturaleza, los jóvenes visitarán destacados monumentos y espacios de la provincia, como Viladonga, Cospeito, Belesar o San Paio.