«El arte de morir»

H. J. P. REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

La obra del neuropsiquiatra inglés Peter Fenwick y su esposa Elizabeth recoge de forma exquisita testimonios de familiares de moribundos, cuidadores y enfermeros

08 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

No es un tema políticamente correcto el de la muerte, aunque el estudio de las formas de morir, del último tránsito, busque conferir significado a la muerte, no como una simple desaparición, y mejorar la existencia del que se queda (dulcificar el duelo) o preparar el modo de afrontar el posible final. De emprender tal análisis, es fácil que el relato del breve viaje recostado en la barca de Caronte pueda virar sobre el papel en un texto de autoayuda. ¿Cómo salvaguardar la dignidad en un momento en que muchos ateos han aprovechado para creer? ¿Cómo no caer en un tratado de carácter religioso cuando lo que está en juego, dicen, es la pérdida de un peso no más allá de 21 gramos? Algunas respuestas están en El arte de morir, obra del neuropsiquiatra inglés Peter Fenwick y su esposa Elizabeth, que trabajó en la asistencia psicológica de enfermos terminales.

El volumen recoge de forma exquisita testimonios de familiares de moribundos, cuidadores y enfermeros que narran visiones, presencias, ensoñaciones, comunicaciones, diálogos, visitas, coincidencias que experimentaron moribundos o sus allegados (casi siempre para facilitar el final). Los Fenwick elaboraron un libro hermoso, del buen morir, que reconcilia con el consuelo, suaviza los miedos y, quién sabe, da claves para vivir de una manera más plena, feliz. Y no es un mero libro de autoayuda, sino, podría decirse, de pura espiritualidad.