Una gaviota se pasea por Monforte

Luis Díaz
LUIS DÍAZ MONFORTE / LA VOZ

MONFORTE DE LEMOS

El ave se alimentó con los restos de comida que encontró por la calle
El ave se alimentó con los restos de comida que encontró por la calle L. DÍAZ

Un ejemplar joven se dejó ver por el centro alimentándose de los restos de comida que encontraba por la calle

24 sep 2023 . Actualizado a las 22:42 h.

El cormorán grande, procedente del centro y el norte de Europa, se ha convertido en una estampa habitual del paseo fluvial de Monforte. En los meses de invierno, cuando este especie migra en busca de temperaturas más benignas, es fácil verlo a la caza de truchas en el tramo del Cabe vedado a los pescadores deportivos. Menos frecuente es tropezarse con una gaviota en una calle céntrica de la Galicia interior un día soleado de finales de septiembre, con máximas de cerca de 30 grados y ni rastro de temporal en la costa.

Sucedió este domingo en la monfortina calle Fontecha, cerca del Parque da Gardería, donde los vecinos se encontraron un joven ejemplar de esa ave rastreando restos de comida cerca de la zona en la que se depositan los cubos para la retirada de la basura doméstica. La gaviota dio señales de vida a eso de las doce del mediodía, delante del portal del número 1, donde algún buen samaritano arrojó de mañana a la calzada migas de pan para que se alimentasen los pájaros.

Pasadas las tres de la tarde, el ave marina devoraba los restos de empanada que habían caído de alguna bolsa de basura mal cerrada. Ni parecía herida ni demostraba demasiado recelo hacia los viandantes que la fotografiaban desde cerca. El fotógrafo Jesús Rodríguez Montero pudo fotografiarla a última hora de la tarde en la otra punta de Monforte, en la calle San Pedro, cerca de la estación de autobuses.

En Ourense hay desde hace tiempo una pequeña colonia de gaviota patiamarilla. Consultado sobre el ejemplar avistado en Monforte, Martiño Cabana, de la Asociación Galega de Custodia do Territorio, saca a relucir esa posible vinculación. «Non é moi habitual que estea en Monforte, pero habendo unha colonia de reprodución en Ourense tampouco resulta estraño», dice. «Poderían ser individuos dispersantes xuvenís de Ourense ou dalgunha outra localidade de cría, xa costeira, que móvense relativamente boas distancias», apunta Cabana.

La gaviota se dejó ver por la calle Fontecha y no reunía a los transeúntes
La gaviota se dejó ver por la calle Fontecha y no reunía a los transeúntes L. DÍAZ

Para todos los expertos consultados, no hay duda de que se trata de un ejemplar de corta edad. «Terá tres meses de idade», opina el ornitólogo Xabier Varela. Esta circunstancia complica, según su criterio, identificar solo mediante fotografías la especie a la que pertenece la gaviota que recaló en Monforte. «Ten cousas de patiamarela e tamén de escura. En exemplares xuvenís é imposible aseguralo con certeza ata entrado o outono, cando a muda vai progresando», explica.

El hecho de que se trate de una gaviota patiamarilla no implica necesariamente que proceda de la colonia detectada en Ourense. «Pode vir de alí ou de calquera outro lado», indica Varela. Los anillamientos realizados ponen de relieve la entrada en Galicia de ejemplares de esta especie procedentes de la zona mediterránea. Tanto en patiamarillas como en las gaviotas sombrías o escuras es habitual que se produzca una dispersión en los meses de verano y los ejemplares jóvenes son más imprevisibles a la hora de explorar territorios.

«Polo que sabemos, as patiamarelas galegas móvenese menos. As sombrías so máis migratorias. Veñen do norte e do centro de Europa e poden chegar ata Marrocos ou Mauritania», señala este ornitólogo. El ejemplar joven de gaviota que se vio en Monforte pudo hacer escala para alimentarse en uno de esos viajes migratorios.

Jesús Montero, especialista en fotografía de naturaleza y autor de varias exposiciones, ya tuvo ocasión de ver hace años algún ejemplar de gaviota en la ribera del Cabe, dentro del casco urbano de Monforte, que no pudo retratar. Sí lo consiguió la fotógrafa Pili Chaos en abril del 2018, cuando localizó un ejemplar de gran tamaño encaramado al puente viejo. La imagen todavía se puede ver en su cuenta de Facebook.