Israel y Hamás se preparan para retomar la guerra al final de la tregua

Gaza vivió el miércoles la última jornada de las 48 horas de extensión de la tregua entre los mensajes optimistas de Egipto, Catar, Estados Unidos y Hamás y las palabras de Israel sobre su disposición a «retomar de manera inmediata la lucha», según su ministro de Defensa, Yoav Gallant. En medio de la incertidumbre sobre la posibilidad de acordar nuevas jornadas de pausa, los terroristas anunciaron su plan de entregar a 12 rehenes (10 israelíes y 2 mujeres de nacionalidad rusa) y Tel Aviv preparó una lista con 30 presos palestinos. El grupo islamista liberó a las ciudadanas de Rusia a media tarde en un gesto dirigido al presidente Vladimir Putin, pero todavía estaba pendiente el inicio de la liberación del resto de cautivos y la posible ampliación de la pausa humanitaria seguía en el aire. Hamás fue el primero en mover ficha e informó a los mediadores de su disposición a extender la tregua «cuatro días más». Ghazi Hamad, miembro de la cúpula política del grupo, adelantó en una entrevista a Al Yazira que «estamos dispuestos a liberar más rehenes si se prolonga el alto el fuego. Mantenemos la comunicación con nuestros hermanos en Catar y Egipto para ver cómo podemos gestionar esta operación. Esperamos que podamos implementarla hoy mismo [por ayer] para que veamos una nueva extensión». Los islamistas reconocieron que está sobre la mesa de negociación la posibilidad de liberar a soldados y que esperan alcanzar «un acuerdo integral» que permita la liberación de todos los prisioneros palestinos en las cárceles de Israel.

«Extender la pausa»

Antony Blinken, secretario de Estado de EE.UU., que el fin de semana regresará a Israel, declaró ante los medios que, «de cara a los próximos días, nos concentraremos en hacer lo que podamos para extender la pausa para que podamos seguir sacando a más rehenes y recibiendo más asistencia humanitaria». El número final de rehenes en Gaza sigue sin estar claro y Catar no ha escondido los problemas que tiene Hamás para recolectar a los cautivos que están en manos de otros grupos.

Israel estima que quedan al menos 161 rehenes en Gaza y 15 de ellos son extranjeros, señaló el portavoz del Gobierno, Eylon Levy. Fuentes del Ejecutivo declararon al diario Haaretz que «Hamás dispone de mujeres y niños para al menos dos o tres días más de tregua».

Además de los intercambios de presos y secuestrados, cada día que pasa sin bombardeos y combates ha permitido la entrada a la Franja de 200 camiones con ayuda humanitaria y combustible. El alto el fuego ha servido para que los gazatíes tomen conciencia de la dimensión de la operación de Israel, que «ha dañado o destrozado el 45 % de las casas» del enclave, en declaraciones del secretario general de la ONU, António Guterres.

Hamás, Egipto, Catar y Estados Unidos mostraron su optimismo sobre la extensión de la tregua, pero el Gobierno hebreo mantuvo en todo momento una postura ambigua. Fuentes de la mediación consultadas por The New York Times explicaron que «cuanto más dure la tranquilidad, más difícil será para Israel reiniciar su ofensiva y extenderla al sur de Gaza, donde se cree que se esconden altos líderes» de los islamistas. Benjamín Netanyahu, primer ministro israelí, quiso zanjar el debate sobre la vuelta o no a la guerra: «En los últimos días escucho una pregunta: después de que se agote esta fase de retorno de nuestros secuestrados, ¿Israel volverá a luchar? Entonces mi respuesta es un sí inequívoco. No hay manera de que no volvamos a luchar hasta el final».

Nuevos ataques en Cisjordania

Donde no ha habido ningún tipo de tregua es en Cisjordania. El ejército lanzó una nueva operación en Yenín, al norte de los territorios ocupados, en la que asesinó a los dirigentes de Yihad Islámica Muhammed Zubeidi y Wissam Hanoun. En su transcurso los francotiradores mataron también a un niño de 9 años de un tiro en la cabeza y a un joven de 15.

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