Los elogios de Macron a Mitterrand desatan suspicacias en los socialistas
INTERNACIONAL
«Lo hace para volver a centrar su quinquenio, que se ha desviado hacia la derecha», asegura Ségolène Royal
08 ene 2021 . Actualizado a las 21:35 h.Un año después de que Francia celebrara el año De Gaulle, el presidente francés, Emmanuel Macron, dio este viernes el pistoletazo de salida al año Mitterrand visitando la tumba y la casa natal de François Mitterrand 25 años después de su muerte. Los socialistas temen que el mandatario utilice esta conmemoración para hacer un guiño a los votantes de izquierdas con el fin de recuperar votos perdidos de cara a las elecciones presidenciales del 2022, después de haber dado un giro a la derecha durante su mandato.
En el 2020 se celebraron los 130 años del nacimiento del presidente Charles De Gaulle, 80 años de su llamamiento a los franceses para resistir la ocupación nazi y 50 años de su muerte. En el 2021 se conmemora, además del 25 aniversario del fallecimiento de Mitterrand, 40 años de su llegada al poder en 1981 y de la abolición de la pena de muerte en Francia, uno de los grandes legados del primer presidente socialista de la V República.
Contra el nacionalismo
El homenaje de Macron a Mitterrand, presidente entre mayo de 1981 y mayo de 1995, fue silencioso. No hizo ningún discurso. Rodeado de políticos socialistas, Macron se limitó a poner una corona de flores en su tumba y a visitar la casa en la que nació en Jarnac (oeste de Francia), la localidad en la que está enterrado. «25 años después de su muerte, el legado del presidente François Mitterrand sigue vivo», escribió en Twitter Macron.
«Europeo convencido, François Mitterrand fue uno de los primeros en ver en la construcción europea una garantía de estabilidad y paz en el continente. No olvidemos sus palabras: ‘El nacionalismo es la guerra'». Mitterrand pronunció esta frase en 1995 en un discurso ante el Parlamento Europeo. Desde que llegó a la presidencia en mayo del 2017, Macron ha buscado constantemente referencias históricas y se mira en el espejo de sus antecesores en el puesto.
Ahora le llega el turno a Mitterrand, lo que levanta suspicacias entre los socialistas, que le ven dobles intenciones. «Emmanuel Macron lo hace para volver a centrar su quinquenio, que se ha desviado hacia la derecha», dijo Ségolène Royal, exministra y excandidata socialista a las presidenciales del 2007, a Le Monde.