El Gotardo permitirá reducir hora y media el viaje entre Zúrich y Milán a 325 trenes diarios
02 jun 2016 . Actualizado a las 07:32 h.Casi veinte años de obras, 2.400 obreros en tres turnos diarios, tres años de pruebas y controles de seguridad, 12.000 millones de francos -unos 11.800 millones de euros al cambio actual- 57 kilómetros y trenes de última generación para acortar en una hora y media el tiempo de viaje entre Zúrich y Milán, dos de las grandes ciudades centroeuropeas, ejes del tránsito de personas y mercancías entre el norte y el sur del continente. Esas son algunas de las cifras del túnel del Gotardo, que ayer se inauguró oficialmente y que desde hoy entra en servicio a casi 2,5 kilómetros bajo la tierra, mejor dicho, la roca, de los Alpes Lepontinos, entre las localidades de Erstfeld y Polleguio, y que permitirá que transiten por sus tripas 325 trenes diarios, 260 de mercancías y 65 de pasajeros, a velocidades punta de hasta 250 kilómetros por hora.
Por hacer algunas comparaciones, el túnel más largo de Galicia es el de O Corgo, en Ourense, con 8,8 kilómetros de longitud. El más largo de España es el de Guadarrama, con unos 27 kilómetros. Y el Eurotúnel, entre Francia e Inglaterra, ocupa 32 kilómetros.
Todas esas distancias languidecen ante los 57 kilómetros del túnel principal del Gotardo, el eje de un conjunto de galerías y zonas de servicio de 160 kilómetros para sustituir al viejo túnel actual, de apenas 15 kilómetros.
El proyecto arrancó en 1993. El objetivo era sustituir la infraestructura original, en servicio desde 1881, que restringía la competitividad de un eje clave en la intermodalidad europea. Las obras se iniciaron en cuatro puntos de forma simultánea. La excavación en sí bajo el monte arrancó en el 2003 y duró ocho años en los que fueron retirados 13,3 millones de metros cúbicos de roca. Y sí, pese a la famosa puntualidad suiza, la obra se inaugura cinco años después de lo previsto. El resultado final impresiona.