El cerebro de los atentados adiestró a un marroquí que vivía en Torrevieja

Melchor Sáiz-Pardo MADRID / COLPISA

INTERNACIONAL

efe

El Kaid fue detenido en junio en Varsovia cuando volvía de combatir en Siria

22 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Abdelhamid Abaud, Abu Umar al Baljiki, el fallecido cerebro de los atentados del viernes 13 en París, adiestró en Siria durante varios días en el «manejo de armas y explosivos» a Abdeljail Ait el Kaid, un yihadista marroquí que hasta mediados del 2014 vivió en la localidad alicantina de Torrevieja, según confirmaron ayer fuentes de la lucha antiterrorista. 

Abdeljail Ait el Kaid fue detenido el pasado 22 de junio en el aeropuerto de Varsovia cuando, tras hacer una escala en Belgrado, trataba de volver de Siria para instalarse en Barcelona. El Kaid fue arrestado en virtud de una Orden Internacional de Detención (OID) que emitió en enero de este año el titular del Juzgado de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional, Santiago Pedraz. Este magistrado envió al supuesto terrorista a prisión una vez que las autoridades polacas le entregaron a los agentes en España. 

Antes de su marcha al Estado Islámico, el marroquí Abdeljail Ait el Kaid había sido sometido a una estrecha vigilancia por efectivos de la Jefatura de Información de la Guardia Civil, que habían tomado nota de su radicalización. Según las investigaciones de los servicios antiterroristas españoles, El Kaid durante la primavera de este año estuvo a las órdenes de Abdelhamid Abaud durante una estancia de varios días en Raqa, la capital siria del autoproclamado califato, donde el fallecido acababa de recalar tras huir en enero precipitadamente de Grecia, después de una operación antiterrorista llevada a cabo el pasado 15 de enero en la localidad belga de Verviers, en la que murieron dos yihadistas y fueron arrestados otros tres, amigos de Al Baljiki (el Belga). 

El propio El Kaid, tras su detención, admitió haber entrado en «combate» en Siria y haber sido adiestrado para cometer atentados en Europa por Abaud, aunque la Guardia Civil sostiene que el marroquí no tenía ningún plan concreto para atacar. 

Confesión

Lo que también desveló El Kaid fue que otro compañero suyo, el también marroquí Reda Hame, sí que había recibido órdenes concretas de Abaud para atentar en París contra una sala de conciertos.

 El Ministerio del Interior español alertó de inmediato a los servicios antiterroristas de Francia de los planes de Abaud y Reda Hame. De hecho, el 15 de agosto, Hame fue arrestado en Francia tras haber pasado por Turquía, Polonia, República Checa y Holanda. Las autoridades galas, tras la captura de Reda Hame, dieron por conjurado el atentado contra la sala de concierto. Sin embargo, Abaud retomó sus planes con otra célula.

En algún momento Hame se separó de su compañero El Kaid, porque este llegó a Polonia procedente de Belgrado. El aviso de las autoridades españolas a Francia fue clave dado que Reda Hame ni estaba fichado ni constaba que se hubiese desplazado a Siria. Apenas unos 6.000 combatientes  fichados de los cerca de 25.000 que ha recibido Daesh (el acrónimo árabe del Estado Islámico) procedentes de países occidentales, según datos de Interpol.

La Policía francesa puso ayer en libertad a siete de las ocho detenidos en la operación en Saint-Denis donde murió el cerebro de los atentados de París. El que sigue arrestado es Jawad Bendaoud, el dueño del piso donde se encontraba Abaud.