«Ortega se repartió con la derecha las instituciones del Estado»

Julio á. fariñas REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Haydeé castillo, exdirigente de las Juventudes Sandinistas estuvo en Galicia.

29 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Haydeé Castillo, exdirigente del Frente Sandinista, dirigente del movimiento feminista nicaragüense y líder de los movimientos sociales de oposición al Gobierno de Daniel Ortega, estuvo la pasada semana en Galicia. En todos los foros en los que participó no dejó de denunciar las elecciones del pasado día 6 en su país, en las que hubo -dice- «demasiadas evidencias de fraude».

- ¿En qué se concretarían esas evidencias?

- Bueno, el fraude, en realidad, comenzó mucho antes, con el pacto de Daniel Ortega con la derecha, con el corrupto Arnoldo Alemán, con quien se repartió los poderes y las instituciones del Estado. Tenemos unas instituciones públicas dirigidas por funcionarios escogidos por fidelidad partidaria, sometidos al designio de sus caudillos y no sujetos a la ley. Solo les faltaba por repartirse el Parlamento.

- ¿Y durante el proceso electoral?

- La falta de transparencia fue total. No se acreditó a unos 200.000 jóvenes para votar, solo a los suyos. Las credenciales a interventores de otros partidos se distribuyeron tardíamente, el conteo de votos se hizo solo en presencia de los oficialistas, no se publicaron los resultados de cada una de las 12.000 juntas receptoras.

- ¿Era reelegible Daniel Ortega con la actual Constitución?

- No, pero al no lograr sacar adelante la reforma constitucional, ordenó a la Corte Suprema de Justicia decir que la prohibición constitucional de una reelección continua era inaplicable. Así, se declaró inconstitucional la Constitución, acogiéndose al principio de igualdad de todos los ciudadanos ante la ley.

- ¿Nadie se lo objetó?

- Un Consejo Supremo Electoral de magistrados con períodos vencidos en el 2010, que continuaron en sus cargos por decreto presidencial dio por buena su candidatura. Al no dimitir antes, se convirtió en juez y parte, lo que encendió las señales de peligro inminente. Su candidatura representaba el peor escenario para el país por su autoritarismo, su neoliberalismo y su reciente conversión al fundamentalismo religioso, que se ha convertido en política de Estado.

- ¿Cómo se presenta el futuro del país en esta coyuntura?

- Se nos avecinan tiempos muy difíciles. Ahora que tiene mayoría en el Parlamento no va a tardar en plantear una reforma de la ley electoral para posibilitar una reelección permanente y hereditaria.

- ¿Y el de Daniel Ortega?

- La suerte de Daniel está ligada a la de Hugo Chávez, porque está utilizando de forma carismática la cooperación que depende exclusivamente de Venezuela.