Los actores de la era pos-Mubarak

Rosa Paíno
Rosa Paíno REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Intereses e ideologías pueden hacer naufragar la primavera egipcia

23 nov 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Los manifestantes de la plaza Tahrir, la Junta Militar, partidos de muy distinta ideología e intereses y los movimientos civiles protagonizan el tour de force en la grave crisis que vive la transición en Egipto.

EL eJÉRCITO

De héroes a villanos. «El Ejército pasó de ser el protector de la revolución a ser una carga», escribía el lunes el editorialista Fahmi Howeidi en el diario egipcio Al Shoruq. Los revolucionarios de Tahrir pusieron en manos del general Mohamed Huseín Tantaui y su Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas la misión de encarrilar la transición hacia un Estado democrático y por supuesto civil. Pero hace unos meses comenzaron a denunciar el afán de la Junta Militar por aferrarse al poder y perpetuar el sistema represivo de Hosni Mubarak, con la connivencia de un Gobierno títere. La gota que colmó el vaso fue un nuevo retraso en la fecha para elegir en las urnas al presidente de Egipto y el Comunicado Selmy, un texto que debe su nombre al viceprimer ministro Alí al Selmy y en el que se otorgan privilegios a los militares en la futura Constitución: como garantizar la amplia autonomía del Ejército y decidir su propio presupuesto. En poco meses, el general Tantaui ha pasado de héroe a villano. Un hombre leal a Mubarak durante veinte años y que los diplomáticos de EE.UU. definían como un pragmático resistente al cambio, y con poco tacto político, en los cables de Wikileaks.

FUERZAS Policiales

El brazo represor. Las fuerzas de seguridad han sido el brazo ejecutor de la represión de Hosni Mubarak. Odiada y acusada de corrupta, la policía sigue siendo un reducto del antiguo régimen. Los mismos mandos que dirigieron la brutal represión en el inicio de la revuelta el 25 de enero en Tahrir son los que han vuelto a golpear a los actuales manifestantes con una fuerza desproporcionada. El movimiento juvenil exige por ello una reestructuración completa del Ministerio del Interior y de la seguridad.

Hermanos musulmanes

Ansias de poder. Los Hermanos Musulmanes, proscritos aunque tolerados durante el régimen de Mubarak, son la mayor fuerza opositora. Pese a ser los impulsores de la primera protesta del viernes, ayer se desvincularon de la Marcha de un millón y apostaron por participar en el diálogo con la cúpula militar. La decisión de la vieja guardia no es compartida por los jóvenes de la organización, que se han desvinculado de ella y muchos estuvieron ayer en Tahrir. Aunque críticos frente al poder militar, los Hermanos temen que la violencia provoque un aplazamiento de las legislativas, que comienzan el lunes, en las que calculan obtendrían un buen resultado. Cuanto más fuertes sean en el Parlamento más influirán en la redacción de la nueva Constitución, y por tanto muchos de los preceptos islamistas que defienden estarán incluidos en ella.

LOS salafistaS

Los más radicales. Al igual que los Hermanos Musulmanes, los salafistas han preferido sentarse en la mesa de diálogo con los militares que manifestarse en la plaza Tahrir. Pero también muchos de sus miembros no comparten la línea oficial y estaban ayer en las calles. Estos islamistas radicales llenaron los titulares de los diarios con sus ataques a negocios que vendían alcohol y a santuarios sufíes (una rama del islam) alegando que eran contrarios a la práctica islámica. Recientemente, el partido Al Nour (luz) cambió un cartel electoral con la imagen de una candidata por el de una flor.

PartidoS LAICOS

Socialistas y liberales. Los partidos laicos son un conglomerado de ideologías que van desde el socialismo panárabe al nacionalismo liberal, y participan en la protesta y en el diálogo. El Bloque Egipcio es la principal alianza y agrupa a formaciones como el Partido de los Egipcios Libres y el Partido Socialdemócrata. Apoya la movilización en Tahrir, un Gobierno de salvación y el fin del estado de emergencia. El Nobel de la Paz Mohamed el Baradei declaró su simpatía por los manifestantes y exigió un Gobierno de transición civil. El exministro de Exteriores y el ex secretario general de la Liga Árabe Amr Musa exigía poner fecha a las elecciones presidenciales -a las que piensa presentarse-, pero a la vez advirtió en contra de una retirada anticipada de la Junta Militar. El Baradei no ha tomado aún una decisión.

MOVIMIENTOS JUVENILES

La fuerza de Internet. El Movimiento 6 de Abril, organización juvenil germen de la primavera egipcia, sigue jugando un papel clave a través de las redes sociales. Su cara más visible es Wael Ghonim, ejecutivo de Google en Oriente Medio que lanzó la revuelta por Twitter y Facebook con Todos somos Jaled Said, en recuerdo del mártir de la represión El movimiento rechazó la reunión de ayer entre los políticos y la Junta Militar, ya que considera que los partidos presentes en la reunión «no representan a Tahrir».