Pampín, cuando rendirse no es una opción

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Con un año de contrato y sin contar para Coudet, el capitán del Celta B se mentalizó para exprimir la temporada. Ha alcanzado su mejor versión con un nutricionista y un preparador personal

17 nov 2021 . Actualizado a las 21:31 h.

Diego Varela Pampín (Oleiros, 2000) está convirtiendo una situación incómoda en un escaparate para el futuro. El capitán del Celta B no tuvo opciones con Eduardo Coudet y el club tampoco facilitó su salida el verano pasado pese a estar en su último año de contrato. En esa situación, lo más fácil sería dejar pasar el tiempo y el 30 de junio marcharse como agente libre. Sin embargo, Pampín cogió la temporada por los cuernos y está dando su mejor versión de siempre, incluso jugando como carrilero derecho cuando es zurdo cerrado.

«Estiven en Barreiro o domingo e gustoume moito incluso como carrileiro dereito. Está implementando máis cousas no seu xogo, mellorou moito na fase defensiva e é un xogador que sempre tivo chegada, porque o seu posto era media punta ou extremo esquerdo. Creo que estamos vendo a un moi bo Pampín», comenta sobre el céltico Jacobo Montes, que fue su entrenador en el Celta B durante unos meses.

Desde que hizo acto de aparición en el filial, hace cinco años y como lateral izquierdo, el de Oleiros siempre había cumplido, pero nunca a su nivel actual. En su evolución hay que tener en cuenta varios factores: el trabajo con un nutricionista desde hace unos meses, un preparador personal con el que tiene trato desde hace años y al que recurre en los días libres y también una mudanza con la que ha ganado tranquilidad. Vivir en el centro de Vigo le ha sentado de maravilla.

Más tranquilidad y confianza

Factores que en el campo le han dado tranquilidad y confianza, incluso para jugar a pierna cambiada y demostrar que no tiene la derecha para apoyar como demostró en el centro que originó el primer gol de Iker Losada el domingo ante el Valladolid B. «Siempre le pegó con las dos, aunque en la izquierda tenía un cañón», precisa Raúl Martos, el que fue su técnico en el Victoria en los dos años de infantil y desde donde dio el salto al Celta. En el conjunto coruñés jugaba de delante de referencia.

Actuaciones como la del domingo le pueden abrir el futuro a cualquier escenario, incluso el de una renovación. «O Celta ten que pensar ben o que fai con el porque estamos ante un rapaz novo con moita marxe de mellora e igual deberían contemplar renovalo e facer como fixeron con Sergio Carreira, cedelo a un Segunda e ver se realmente dá o paso definitivo para poder incorporarse á primeira plantilla. Diego está poñendo enriba da mesa todo o que ten para facer dubidar ó Celta», apunta Montes. Hace tiempo que se dieron los primeros contactos, pero por ahora las posturas no parecen cercanas.

Más allá de seguir o no en el Celta, Pampín nunca ha desistido en su idea de ser futbolista profesional. «É unha excelente persoa, un rapaz que quere mellorar e que ten fame. É un rapaz e 21 años pero é moi maduro para a súa idade», comenta Jacobo Montes, que en lo deportivo lo ve como un lateral de largo recorrido, con llegada y con decisión para centrar, incluso jugando a pierna cambiada. Raúl Martos, que le ve muy maduro, le recuerda desde pequeño como «un trabajador nato, no se saltaba nada, lo hacía todo, siempre ha tenido la cabeza bien amueblada, igual que su familia, que le ha ayudado mucho».

A lo largo de este lustro en el Celta B, Pampín también ha dado un paso adelante a nivel defensivo. «Mellorou, especialmente no xogo ás costas, no que sufría un pouco e agora véselle moi solvente». También, y pese al hándicap de la estatura, tiene capacidad para ganar duelos. «É un xogador moi completo para a categoría». Sus más allegados le ven como un jugador que ha evolucionado en todos los sentidos.

A su favor juega que Onésimo Sánchez haya apostado por la defensa de tres centrales. Un detalle que suma en un año clave que Pampín no ha querido dejar pasar. La temporada 2021/2022 marcará su futuro. «Ya debería estar en el fútbol profesional, pero llegará seguro», concluye el que fuera su técnico en el Victoria. Está convencido desde el primer día que le vio. Tiene buen ojo.