El argentino, pendiente de oficialización, firmará hasta el 2022 cuando se desvincule del Internacional
10 nov 2020 . Actualizado a las 05:00 h.Eduardo Chacho Coudet, con quien ya existe un principio de acuerdo, se convertirá en el décimo séptimo entrenador del Celta en la era Mouriño. El argentino, con pasado efímero en el Celta, era la tercera opción que manejaba el conjunto vigués para sustituir a Óscar García Junyent, que fue destituido una hora antes de comenzar a dirigir el entrenamiento del lunes en A Madroa. Es el primer cese de la temporada en Primera División tras nueve jornadas.
Después de la negativa definitiva de Marcelino García Toral, la cúpula del Celta intensificó sus contactos en la madrugada española para cerrar la llegada de Coudet, entonces todavía entrenador de los brasileños del Internacional de Porto Alegre -su presidente confirmó anoche que ha dejado de serlo- y que debe llegar a Vigo en los próximos días para firmar hasta junio del 2022.
Con el relevo encaminado, se procedió a la destitución de Óscar García, que acudió a A Madroa a despedirse de los que fueron sus jugadores durante el último año y de la ciudad deportiva salió con una ovación y con muestras de agradecimiento por parte de la mayoría del plantel. Óscar García estaba afectado y después de los acontecimientos del fin de semana tenía la esperanza de continuar en el cargo, pero era consciente desde hace tiempo que su primer cese como entrenador podría darse en Vigo dado el clima de enfrentamientos que vivía con parte de la zona noble del club, a lo que se unían los resultados. Esas diferencias venían dadas en especial por la planificación deportiva y la toma de decisiones en los últimos años.
Poco después de abandonar la ciudad deportiva, el técnico se despidió del celtismo sin hacer ninguna mención al consejo de administración. De un modo paralelo, el Celta hacía oficial el cese. «Óscar García Junyent y su cuerpo técnico no seguirán al frente del banquillo del RC Celta. El club transmite su más sincero agradecimiento, tanto al entrenador catalán como a sus colaboradores por su trabajo, profesionalidad y esfuerzo demostrado durante su etapa en el RC Celta, en la que consiguieron certificar la permanencia en una complicada temporada 2019/2020», comentaba el escueto comunicado. De esta manea se ponía punto y final a una relación que duró 371 días y que se salda con una salvación agónica y con el entrenador poniendo al descubierto la situación del club. A esa hora, en A Sede se negociaba el finiquito de un técnico que tenía firmada una temporada más, con otra opcional.
El último escollo para hacer oficial el fichaje del Chacho Coudet era su relación con el Internacional de Brasil, a quien entrenaba en la actualidad y al que mantenía líder del Brasileirão, además de avanzar en la Copa Libertadores. Tenía contrato en vigor hasta diciembre del 2021. Al campeoanto brasileño llegó en diciembre del año pasado después de conquistar sus mayores éxitos en el fútbol argentino, en donde entrenó a Rosario Central y a Racing de Avellaneda, equipo al que hizo campeón del liga y con quien ganó un trofeo de Campeones de la liga argentina.
Coudet, de oficio centrocampista en sus tiempos como jugador, tuvo un fugaz paso por el Celta en la temporada 2002/2003. Llegó para sustituir a Valeri Karpin, pero solo disputó nueve partidos en los cuatro meses que estuvo en Vigo.
Se marchó en el mes de enero del 2003 y casi 18 años después, emprende el camino de regreso para hacerse con el banquillo de un equipo abocado a luchar una temporada más por la permanencia y para dirigir a una plantilla con importantes carencias. Todo un reto para su desembarco en Europa.
