Benedicto XVI fue sorprendido con una exhibición circense a cargo de un grupo de acróbatas.
12 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Un cocodrilo cubano de una rara especie fue llevado a la audiencia pública de Benedicto XVI en el Vaticano. El papa fue sorprendido además con una exhibición circense a cargo de un grupo de acróbatas.
El cocodrilo, de la especie Crocodylus rhomfider, fue llevado al Aula Pablo VI del Vaticano por personal del Bioparco (parque zoológico) de Roma, que este año celebra el centenario de su fundación.
El cocodrilo, de 40 centímetros, será devuelto a Cuba en marzo próximo, coincidiendo con el viaje que Benedicto XVI hará a la isla caribeña.
Según el Bioparco, el número de Crocodylus rhomfider se ha reducido en los últimos años en un 80 % y, para la Unión Mundial para la Conservación de la Naturaleza, es una especie amenazada. Este tipo de cocodrilo vive en una pequeña zona de Cuba.
El presidente de la Fundación Bioparco, Paolo Giuntareli, afirmó que con el envío del cocodrilo a Cuba, el zoo de Roma, que pertenece a la diócesis del Pontífice, quiere sumarse al viaje de Benedicto XVI a la isla caribeña.
Ratzinger fue sorprendido también por un grupo de equilibristas, malabaristas y payasos de los circos Medrano, Acquatico y el de Rony Roller; una veintena de artistas que asistieron a la audiencia papal y que convirtieron el Aula Pablo VI en un improvisado circo.