Evita confirmar si el PP apoyará el decreto de medidas anticrisis del Gobierno, y ante la cita con Pedro Sánchez del jueves dice que es prioritario bajar impuestos antes que renovar el CGPJ
05 abr 2022 . Actualizado a las 10:24 h.El relevo de Alberto Núñez Feijoo al frente de la Xunta de Galicia se ejecutará de forma «muy rápida». Lo avanzaba este martes el todavía presidente del Gobierno gallego en una entrevista en Onda Cero, apuntando al próximo mes: «En mayo estará todo el mundo en sus puestos». La transición será cuestión de «semanas, no meses», ha confirmado, aunque sin querer entrar a dar nombres. Alfonso Rueda, el vicepresidente primero de la Xunta, es a día de hoy quien está mejor situado para asumir ese cambio.
Feijoo no ha confirmado si después de dejar la Xunta y el Parlamento (tiene su escaño, algo obligatorio para ostentar la presidencia en Galicia) será senador por designación autonómica. «No lo descarto», es todo lo más que ha dicho. Ese puesto en la Cámara alta le permitiría debatir cara a cara con Pedro Sánchez al menos una vez al mes, y mantener el aforamiento judicial.
En esa misma entrevista, Feijoo ha evitado confirmar si el PP -que preside desde el sábado- apoyará al Gobierno en el Congreso para poder aprobar su decreto de medidas anticrisis. Esperará antes para ver qué le traslada Pedro Sánchez en la reunión que tienen ya en la agenda para este jueves: «Veremos si allí acepta alguna propuesta [del PP] o si esto es sí o sí». «No puedo apoyar un real decreto que dice que se trata de ayudas por la guerra de Ucrania cuando la inflación viene de antes, no puedo engañar a los españoles así». «Si quiere que lo apoye [el decreto] me escuchará», ha completado.
«Quiero que España trabaje como un país adulto», ha explicado. Y su prioridad, ha insistido, pasa por que el Gobierno apruebe una bajada de impuestos, como se detalló en la reunión de presidentes autonómicos de La Palma. Es prioritario para el PP, antes que la renovación de cargos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).
Sobre la relación con Vox, el dirigente gallego no ha querido confirmar si asistirá a la toma de posesión del nuevo gobierno de Castilla y León, donde se ha fraguado la primera coalición PP-Vox. Ha esquivado la cuestión de si los de Abascal pueden ser considerados como extrema derecha: «Yo no vengo aquí a descalificar a ninguna fuerza política, no me apunto a la tensión». Pero ha marcado distancias: «Nosotros somos autonomistas y europeístas, y ellos no».
