Frustración más precariedad, el círculo vicioso de la «generación engañada»

b. casal REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Imagen de archivo de una prueba de selectividad en el Campus Terra de Lugo (USC) en el 2021
Imagen de archivo de una prueba de selectividad en el Campus Terra de Lugo (USC) en el 2021 OSCAR CELA

Los psicólogos demandan más atención en los colegios para atajar problemas

23 feb 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La madurez emocional y la atención temprana de profesionales especializados son cruciales para el devenir de los jóvenes, tanto a nivel educativo como laboral. Así lo cree Hipólito Puente, vicedecano do Colexio de Psicoloxía de Galicia y psicólogo educativo. «Moitos rapaces da ESO non teñen a madurez suficiente para analizar as situacións que enfrontan e iso dificulta a toma de decisións», señala Puente sobre una situación que luego influye mucho en su incorporación al mercado laboral. Esa inmadurez, a su juicio, es mayor ahora que hace unos años porque «hai unha maior sobreprotección das familias, que loxicamente actúan coa mellor intención, pero ao final limitan a autonomía e a iniciativa dos seus fillos», explica Puente.

A eso hay que sumar la frustración que enfrentan muchos jóvenes con empleos precarios o sin trabajo. «Hai cuestións estruturais que non teñen que ver con eles, como un desemprego xuvenil case endémico, pero na frustración pesan moito as expectativas que un crea», señala Carlos Montes, presidente de la sección de Psicoloxía do Traballo e as Organizacións del Colexio profesional.

En su opinión, es importante asumir las dificultades que presenta el mercado, tanto para los que enfrentan la transición a la vida activa con varios años de formación a sus espaldas, como para los que lo hacen habiendo abandonado, en mayor o menor medida, sus estudios. «Se ves a túa traxectoria como un camiño recto vaste frustrar, porque a vida non é así e está chea de curvas. As capacidades de absorción do mercado, por desgraza, son limitadas», añade Montes.

Por otro lado, los que buscan su primer trabajo lo hacen en un contexto muy distinto al de otras épocas. Según indica Montes, la generación del baby boom veía el empleo como «algo para toda a vida», mientras que la generación Z (finales de los 90 y años 2000, que algunos dan en llamar la generación engañada) ya no lo entiende así, bien sea por resignación frente a la precariedad, por cambio de aspiraciones laborales o por una mezcla de ambas. «Estamos fronte a un cambio de paradigma. Xa non pensan nunha empresa para toda a vida, senón en traballo por proxectos. Os tempos son distintos e a dixitalización cambiouno todo: forma parte da súa vida desde o modo de relacionarse ata o de encontrar emprego», destaca Montes, que añade que otra dificultad que puede llevar a la desmotivación y frustración es la propia búsqueda de empleo. «A procura do traballo é un traballo en si mesmo», resume.

Problemas educativos

El fracaso escolar deviene en una merma de oportunidades y detrás de eso no está la incapacidad, sino la falta de motivación de los jóvenes. «Algúns están por estar nos institutos e cando buscan unha alternativa, como pode ser unha FP básica, non sempre entran no que queren porque en certos ciclos hai poucas prazas. Iso aféctalles na autoestima e experimentan un fracaso emocional», destaca el vicedecano del Colexio de Psicoloxía.

Esa ilusión inicial al encontrar una alternativa acaba desplazada por una realidad que no siempre les permite estudiar lo que quieren y eso, subraya el psicólogo Hipólito Puente, genera una dinámica de la que les resulta difícil salir. «Algúns rapaces xa son sinalados con tres ou catro anos, por iso demandamos un aumento da atención psicolóxica nos centros e unha boa intervención en infantil. Os problemas que enfrontan poden provocar estrés, ansiedade e mesmo depresión ao longo da etapa escolar e iso acaba sendo un círculo vicioso difícil de atallar», subraya.