Al menos 15 personas han fallecido en soledad en Galicia en apenas 8 meses

André SISO ZAPATA / C. lópez REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

Retirada del cuerpo de un hombre hallado momificado en su casa en el 2017
Retirada del cuerpo de un hombre hallado momificado en su casa en el 2017 EDUARDO PEREZ

El último cadáver, en descomposición, fue descubierto la madrugada de ayer en Fene

09 ago 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Al menos quince personas han fallecido en su vivienda, en la que residían solos, en los apenas ocho meses que han transcurrido de este 2019. Seis de estos casos se han producido en los últimos veinte días, lo que implica que un 40 % del total de esas muertes se han concentrado entre finales de julio y principios de agosto. El fenómeno afecta indistintamente a las cuatro provincias, con fallecidos en Pontevedra, Aguiño, Ourense o Viveiro.

El primero de los casos del 2019 se produjo en Ferrol Vello el 14 de enero. Un hombre de 68 años, al que no veían desde hacía un mes, fue hallado en el interior de su vivienda en avanzado estado de descomposición tras haber fallecido por causas aparentemente naturales. Esta víctima marcó el perfil más habitual de este año: hombres -un 55 % de los casos- y mayores de 60 años.

También en la comarca de Ferrolterra pero, en este caso protagonizado por un hombre más joven, se ha dado la más reciente de estas muertes en soledad, producida ayer en el municipio de Fene. El fallecido es un hombre de 49 años cuya identidad responde a la iniciales R. P. F., y cuyo cadáver fue descubierto pasada la medianoche del miércoles en su domicilio de la avenida del Mar, en el barrio fenés de San Valentín. La voz de alarma la dieron los vecinos del edificio, extrañados de que el felpudo que la persona encargada de limpiar las escaleras dejaba siempre apoyado a la pared permaneciese así varios días. A la vivienda acudió un hermano suyo, que fue el que, al parecer, descubrió el cadáver, y alertó a la Guardia Civil.

El felpudo descolocado durante días alertó a los vecinos del fallecido en Fene

El cuerpo sin vida estaba tendido en el suelo entre la cama y un sillón, y debido al avanzado estado de descomposición no pudo ser identificado en un primer momento. El forense solicitó la presencia del equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil para tratar de confirmar que se trataba del morador de la vivienda, pero su identidad no se pudo certificar hasta que le fue practicada la autopsia el jueves por la mañana en el Hospital Juan Cardona de Caranza.

El fallecido era un hombre muy conocido en su barrio, porque fue un colaborador muy activo en las actividades del Centro de Promoción Social de San Valentín. Trabajó de pañolero en varias empresas auxiliares del naval y en la actualidad estaba en el paro.

El fenómeno de las muertes en soledad ya preocupa a la Consellería de Política Social, que lo relaciona con el creciente número de hogares unipersonales, la desvinculación de las personas mayores respecto a sus entornos de origen y la concentración de habitantes en las ciudades. Dichas circunstancias provocan que estas personas vivan en lugares con relaciones vecinales menos estrechas que las que suelen darse en los pequeños núcleos de población.

El perfil típico es el de un hombre, mayor de 60 años y alejado de su familia y entorno

Aunque desde la Xunta aún no se atreven a certificar que exista un aumento de este tipo de casos en Galicia, sí recomiendan prestar atención a ciertas señales para evitar que una persona de nuestro entorno quede en una situación de riesgo: alertar cuanto antes si no se les ve fuera de casa desde hace un tiempo, realizarles alguna visita en caso de que no tengan familiares o tratar de tenerlos localizados. Los mecanismos de teleasistencia también son una herramienta con potencial para evitar estas tristes situaciones.