El Gobierno desbloquea el convenio para la solución a la niebla en la A-8

Pablo González
pablo gonzález REDACCIÓN / LA VOZ

GALICIA

JAVI V

Prevé licitar los prototipos en octubre para probarlos en verano en la zona afectada

02 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El problema de la niebla en la autovía del Cantábrico a la altura de Mondoñedo pasó de ser una prioridad del Ministerio de Fomento a diluirse en el marasmo del año en que el Gobierno permaneció en funciones. De esta forma, fue imposible efectuar la compra precomercial de los prototipos a lo largo del 2016 para probarlos este verano. El proceso se dilató después de haberse reducido temporalmente la consulta de mercado -de la que surgieron 26 ideas para este problema -, mientras en paralelo se reforzaban las medidas de seguridad en los diez kilómetros más afectados por las nieblas por elevación que se forman en el Cantábrico y se estancan en el alto de O Fiouco, a 698 metros de altura.

Cuando se acaban de cumplir tres años del accidente en cadena que causó un muerto y decenas de heridos, y que motivó los habituales cierres del tramo afectado cuando la niebla impide una distancia de visibilidad mínima, el equipo de Íñigo de la Serna ha retomado el proyecto que se había iniciado durante el mandato de Ana Pastor. Así, el Ministerio de Fomento y el de Economía han logrado desbloquear hace unos días el convenio entre ambos departamentos para que se pueda financiar con fondos Feder lo que denominan compra pública precomercial, es decir, la licitación que permitirá construir los prototipos para probarlos in situ en la autovía o en dos zonas aledañas con las mismas condiciones meteorológicas, dos áreas que se acondicionarán en el tramo de más altitud de la transcantábrica. 

En breve se firmará el citado convenio y, de forma inmediata, se procederá a la licitación del proceso de experimentación de los sistemas innovadores antiniebla, que serán seleccionados en una fase posterior por los técnicos del ministerio una vez que se prueben sus prestaciones en un escenario real. La intención, según fuentes del ministerio, es poder licitar este proceso en octubre como muy tarde, para después probarlo cuando vuelva la temporada de nieblas más densas, que suelen producirse en los meses centrales del año. Según los informes meteorológicos que se encargaron cuando se inició este procedimiento -similar a un concurso de ideas y que no tenía precedentes en Fomento-, los meses de junio y julio son los más afectados por episodios de niebla densa. De hecho, los datos del 2015 reflejan 383 horas de visibilidad casi nula durante estos dos meses. Para valorar la dimensión del problema y la infrautilización a la que están condenados los cerca de 16 kilómetros de autovía que se inauguraron en febrero del 2014, entre septiembre de ese año y diciembre del 2016 el tramo de O Fiouco permaneció cortado 1.772 horas. No obstante, no afecta a todo el tramo por igual y la zona más castigada por la niebla es el recorrido entre el kilómetro 546 y el 549.

Para la experimentación sobre el terreno, Fomento ha habilitado una partida de un millón de euros en los Presupuestos de este año. En las cuentas del Estado se calcula que la implementación de las medidas antiniebla -probablemente una combinación de sistemas que mejoren la visibilidad y otros más relacionados con la seguridad vial- costará unos seis millones de euros, con una programación plurianual que se prolonga hasta el 2019. 

Plazos

Aunque no hay plazos oficiales para la solución definitiva a este problema, tanto la programación presupuestaria como el propio proceso -aún es necesario afrontar la licitación definitiva de los proyectos seleccionados tras las pruebas- indican que sería muy difícil que las medidas estuvieran en funcionamiento antes del 2020.

En cualquier caso, el Gobierno defiende que durante este tiempo ha realizado «todos los esfuerzos posibles» -así se expresó el Ejecutivo en una respuesta parlamentaria- para garantizar la seguridad mientras no se habilita una solución definitiva en O Fiouco.