La expulsión de los críticos de Redondela, el conflicto del escaño de Carmen Iglesias y el pulso con la dirección de Vigo forman parte de un caldo de cultivo en Anova que tiene en la adopción de la fórmula a adoptar para las elecciones europeas el gran escollo que divide a sus cuadros. El grupo que lidera Martiño Noriega en Encontro Irmandiño, la FPG, FOG y Nova Esquerda Galega buscan una estrategia transversal ideológicamente que propicie reeditar con EU, Espazo Ecosocialista y Equo la alianza de las autonómicas y confluir en una lista con IU e iguales fórmulas de unión entre nacionalistas y siglas de izquierda de otras comunidades. Enfrente, el sector oficial persigue una apuesta exclusivamente nacionalista con Bildu en cabeza, como también intenta el BNG. Beiras hasta ahora no se ha decantado por ninguna claramente.