El revés del PP en Asturias y Andalucía, y el trato a Galicia en los Presupuestos, allanan el posible adelanto electoral al otoño
08 abr 2012 . Actualizado a las 07:00 h.El presidente sigue firme en su discurso de agotar la legislatura, pero sus decisiones van por otro lado. Cuando faltan todavía once meses de mandato, Feijoo acaba de emprender la campaña que en los próximos meses lo llevará a recorrer los 315 concellos de Galicia, con visitas como líder del PPdeG que irá intercalando en los huecos de su agenda presidencial. Ese periplo en clave preelectoral ya arrancó el pasado fin de semana, cuando mantuvo contactos con varios alcaldes en Betanzos y O Carballiño, y se intensificará tras el parón de Semana Santa.
Feijoo reproduce así el esquema que siguió antes de las autonómicas del 2009. Estos movimientos surgen en un contexto condicionado por dos de los acontecimientos más relevantes de los primeros 100 días de Rajoy: las elecciones en Asturias y Andalucía, y la presentación de los Presupuestos del Estado. El severo varapalo en las urnas, inesperado en Génova, ha reforzado los argumentos de quienes aconsejan a Feijoo que no espere a marzo para celebrar los comicios gallegos. El presidente ya admitió que hubiera tenido más fácil el triunfo de hacer coincidir las elecciones gallegas con las que se celebraron en Asturias y Andalucía, aunque descartó ese «ventajismo político». Pero Feijoo siempre se ha reservado la baza de un adelanto técnico de unos meses que ya aplicaron Fraga y Touriño.
Ahora que el calendario también hace prácticamente imposible anticipar las autonómicas antes del verano, porque exigiría disolver la Cámara este mes, la tesis de la llamada a las urnas en tiempo de magosto cobra fuerza de la mano de unos Presupuestos del Estado que dan un trato preferente a Galicia y al País Vasco, las dos comunidades que renovarán sus Parlamentos en los próximos meses. En unas primeras cuentas en las que recorta más de 27.000 millones de euros, el Gobierno de Rajoy deja un guiño a Feijoo con una inversión de 1.706 millones, un 9,5 % más que los últimos Presupuestos de Zapatero. Feijoo la presentó como «unha das grandes noticias positivas que tivemos nos últimos anos»
Habrá más gestos, como el compromiso de Rajoy con el nuevo calendario que retrasará el AVE al 2018. Feijoo los recibirá alternando los coches de la Xunta y del PP, en una agenda intensa que le permitirá también aplacar a los alcaldes críticos con sus tesis sobre las fusiones.
El Gobierno todavía tiene muchos ajustes impopulares por delante. Un adelanto electoral minimizaría el desgaste inducido sobre el PPdeG y favorecería las opciones de Feijoo. Perder Galicia es un riesgo que Génova no quiere correr. El origen de la reconquista de la Moncloa no puede ser ahora punto de partida para su pérdida.