Segunda marcha del curso
En la capital de Galicia los docentes volvieron a salir a la calle y de nuevo colapsaron el centro de Santiago. Miles de manifestantes de toda la comunidad -unos 2.500 según el Concello, gobernado por los populares, y 15.000 según los sindicatos- protestaron por el incremento del horario lectivo del profesorado, que en el caso de los maestros pasa de 21 a 25 horas semanales, y por la asignación de tareas a los docentes que no les corresponden, como la custodia del alumnado que utiliza el transporte escolar.
La marcha volvió a tener dos protagonistas indiscutibles, sendos cabezudos disfrazados del presidente de la Xunta, Núñez Feijoo, y su conselleiro de Educación, Jesús Vázquez. Este último fue el más coreado durante todo el recorrido, ya que los manifestantes pidieron su dimisión en innumerables ocasiones, animando al presidente de la Xunta a llevar a cabo la destitución, «Feijoo, austero, recorta ao conselleiro», gritaban. El encargado de leer el manifiesto final, ante la sede de la Consellería de Educación, fue el profesor y escritor Xabier Docampo. El docente criticó el recorte de mil puestos de trabajo en infantil y primaria, y la propuesta unilateral de la consellería «que afonda no desprestixio da función docente».