Un empresario holandés vende el yate que utilizó Franco en los años cuarenta. Ha sido completamente restaurado y tiene un precio de 1,5 millones de euros
29 abr 2005 . Actualizado a las 07:00 h.Cuesta 1,5 millones de euros. A primera vista, un precio demasiado alto para un barco de ochenta años, que tiene una punta de velocidad de 16 nudos, unos 28 kilómetros por hora. Pero el Azorín no es un barco cualquiera. Es el primer yate que compró el Estado para el recreo personal de Francisco Franco, el hermano del Azor , que con el tiempo alcanzaría más notoriedad. El Azorín , después de diversos avatares y cambios de propiedad, está atracado en Holanda. Su armador lo ha restaurado a fondo y lo ofrece al mejor postor. Cree que algún nostálgico adinerado gallego, o alguna institución de la comunidad, podría estar interesado en comprarlo. La embarcación puede considerarse una joya para los aficionados a la náutica. Fue construida en Kiel, en 1925, con destino a la Marina de Prusia. Con 30 metros de eslora por 5 de manga, ofrece ahora mismo unos acabados de lujo, con casco de madera de doble capa y dos motores Rolls Royce de 335 caballos cada uno. Ha renovado sus equipos de comunicación y proporciona a los navegantes una sensación indiscutiblemente señorial: el mármol de Carrara en el cuarto de baño del capitán y la madera de la cubierta son dos ejemplos. La distribución interior incluye cuatro camarotes dobles con baño, una cabina para los tripulantes, una cocina amueblada y un amplio salón. Franco había comprado el Azorín a mediados de los años 40 al marqués de Cubas, que a su vez se lo había adquirido al alcalde de Londres. El general ferrolano, que de joven había querido ser marino, lo solía utilizar para pescar en compañía de sus hombres de confianza, como el gobernador civil de A Coruña Máximo Borrell. Los historiadores también destacan que el yate acogió algún que otro cónclave del régimen, entre ellos un almuerzo con don Juan de Borbón, el 25 de agosto de 1948, frente a la bahía de San Sebastián. Los cocineros prepararon un menú amplio: entremeses, huevos a la americana, ternera Benicarló, patatitas duquesa, bizcocho helado y palitos de hojaldre. Nada del otro mundo, pero sí un pequeño dispendio en aquellos años del hambre. Rutas fluviales Tras la construcción del Azor en los astilleros de Bazán, en 1949, el Azorín prestó servicios en el departamento de vigilancia pesquera. En 1983, la Administración lo subastó en Marín y fue adquirido por 500.000 pesetas por un empresario gallego. Con los años, sería traspasado a un matrimonio holandés y a un operador marítimo del mismo país. Últimamente, fue utilizado para rutas fluviales de recreo, hasta que el dueño de la empresa, octogenario ya, decidió ponerlo a la venta. Varado en un puerto holandés, espera que alguien se dé el capricho de volver a ponerlo en circulación. ¿Y el Azor ? ¿Qué fue del Azor ? El mítico yate, de 45 metros de eslora, reposa en tierra, como extraño atractivo turístico para un restaurante de la pequeña localidad burgalesa de Cogollos. Para la historia de España quedan las imágenes de Franco pescando un cachalote. Y también aquella polémica travesía de Felipe González en el verano de 1985.