La entrega de los premios Érguete fue la crónica de una marcha anunciada, y estuvo arropada por el juez que ordenó la venta del Pazo de Bayón de Oubiña
23 sep 2004 . Actualizado a las 07:00 h.«Yo le llamaría el reposo del guerrero», bromeaba ayer Carmen Avendaño, tras anunciar su despedida. La heroína se va el mismo día que en Madrid se sienta en el banquillo Josefa Charlín, una pieza clave del narcotráfico gallego. Avendaño dijo públicamente adiós ayer en Vigo durante la entrega de los cuartos premios Érguete Solidaridade. Hace año y medio, la portavoz de las madres contra la droga se jubiló tras sufrir una invalidez total. Ayer le entregó el relevo a su junta directiva. «Sí, es una despedida», afirmaba ayer la mujer que inspiró a la protagonista de la película Heroína, pendiente de estreno. «Voy a seguir participando en lo que pueda. Estos años han sido el logro de mucha lucha», añadió Avendaño mientras entrega los trofeos de la fundación Érguete, unos bolos de madera realizados manualmente por los jóvenes que participan en los talleres de la entidad. El periodista radiofónico Iñaki Gabilondo tenía bastantes recuerdos de las madres de Érguete. «Estamos en el pódium de las drogas pero ellas prestaron atención constante al problema. Procedían de la tripa y evitaron que nos durmiésemos», indicó el comunicador. «Eran una presión insoslayable, un drama y sus informaciones palpitaban. Eran humanas y no tenían nada que ver con las estadísticas frías», aseguraba ayer el informador, que se llevó uno de los premios de Érguete como periodista solidario. El magistrado de la sala de lo penal del Tribunal Supremo, el coruñés José A. Martín Pallín, recibió el premio Solidariedade Nacional. Él fue el ponente que dictó la sentencia que ordenaba destinar los beneficios de la venta del Pazo de Bayón, incautado al clan de los Oubiña, a programas contra la droga. «Pocos estuvieron en la lucha ni tuvieron la repercusión de Érguete», dijo el juez. Como representación del Gobierno asistió la directora del Plan Nacional de Drogas, Carmen Moya. Los otros premiados son la entidad Médicos del Mundo, el comisionado del Plan Autonómico, Manuel Araújo Gallego, y la propia Carmen Avendaño.