Los superhéroes se hacen (en) serie

C. Pereiro

FUGAS

El parón pandémico de Marvel y Disney en los cines ha dejado hasta tres producciones de carácter episódico para disfrutar en streaming

21 ago 2021 . Actualizado a las 10:37 h.

Es cierto que si uno acude hoy al cine, podrá ver a una vengadora en la cartelera. Scarlett Johansson, la Viuda Negra que recordará toda una generación, ha estrenado su primera película como protagonista absoluta. Lo curioso es que esta cinta llega once años después de que la actriz se metiera en el traje de la heroína por primera vez, allá por el 2010, en Iron Man 2. Los años siguientes fueron de fervor y júbilo para Disney y Marvel, que solo vieron crecer su fama y poder a lo largo de un total de 23 películas en apenas once años. Tuvo que venir una pandemia mundial para que los estrenos en cine dejasen de llegar. El último fue Spider-Man: Far from home, en el 2019. Hasta ahora.

La historia del UCM (Universo Cinematográfico de Marvel) no ha terminado, y tantos han sido los personajes presentados que no es extraño que parte del contenido, sobre todo si uno admira la dorada época de las series en la que vivimos, acabase en forma de producción episódica. Y ojo, que ya teníamos series de Marvel: Daredevil, Luke Cage, The Punisher, Jessica Jones... Todas ellas se movían en una órbita alejada de las películas. Con éxito, sí, pero en otra órbita de intenciones y relaciones. Disney ha entrado en juego y a través de su propia plataforma ha querido elevar la apuesta.

Hasta tres series hemos podido reproducir en Disney+ a lo largo de los últimos meses. Su principal atractivo radicaba en que estarían interpretadas por los mismos actores que vimos en los cines, sean algunos vengadores y héroes, sean otros villanos reconocidos. Eso y, claro, continuar la historia que la pandemia paralizó, la historia de Marvel en la gran pantalla después de la derrota del Titán Loco en Endgame. ¿Qué ocurriría después? ¿De qué irá la nueva fase de Marvel? (La número cuatro) Es en las series donde vemos las primeras pistas, pues, huelga decir, la acción de Viuda Negra se sitúa bastante antes que esa película crepuscular que fue Endgame.

Tres series, tres relatos

Acabadas ya las tres series, accesibles todos sus episodios, sería imposible no hablar de un nuevo éxito para Disney+. Es este más discreto que los estrenos en las salas, y lo es también en el resultado autoral, demasiado desequilibrado y confuso por momentos, pero éxito a fin de cuentas si solo miramos los números, las visualizaciones y los comentarios en redes cuando cada semana aparecía un nuevo episodio, casi una constante desde enero.

Con todo, hay un desgaste en la fórmula narrativa de Disney y Marvel. No significa esto que no vayan a seguir vendiendo entradas y suscripciones como churros, pero sería demasiado decir que las series han sido obras de obligado visionado, o de gozo absoluto. Son más un ejercicio de captación, de mantenimiento y de continuación: los héroes siguen aquí y sus relatos también. ¿Para qué cambiarlos?

Lo intentó WandaVision (aquí llamada Bruja Escarlata y Visión, otorgando un destripe a la altura de La semilla del diablo), con un comienzo enigmático, ofreciendo en su propuesta un homenaje curioso a las producciones del pasado, caminando entre los interrogantes del respetable, provocando teorías y choques de opiniones. Con cada episodio, la extrañeza se fue acercando más a lo de siempre, hasta llegar al desenlace final: justo el que cabría esperar.

Del experimento (controlado) se pasó al rito cuasi religioso de The Falcon and the Winter Soldier. No por ser este un contenido sacro, filosófico o moral, sino por seguir al dedillo las leyes y fórmulas básicas del UCM, generando un producto tan disfrutable en su primer visionado como olvidable en el resto. Hay momentos interesantes, hay hilos de los que tirar y sugerir, pero todo se queda en el camino típico y «adecuado».

Loki es la última bala de esta primera remesa de series de Disney+ (aunque en estos momentos ya ha comenzado la emisión de What if...?, una serie de animación basada en posibles y futuribles, tomando la ucronía como base). En ella, cumpliendo con lo previsible, Tom Hiddleston brilla con luz propia, amparado en un personaje que ha ido ganando en interés y profundidad al tiempo que pasaban las películas, hasta convertirse en uno de los más queridos y explotables de la franquicia. No mencionaré más actuaciones ante la posibilidad de entrar en spoilers, pues el último episodio ha visto la luz hace apenas una semana.

La serie del dios del engaño se mueve a medio camino entre WandaVision y The Falcon and the Winter Soldier. Quiere sorprender, quiere ser algo un tanto diferente, aunque todos sepamos el producto que es y que quiere ser. Hay misterio, hay acción y hay una serie de cuestiones sobre la mesa que, como ocurría con las otras dos series, abren la puerta a las nuevas historias que veremos en el cine, con el multiverso y el apogeo de las fuerzas mágicas de Marvel (o eso parece).

Sea como fuere, Disney empieza fuerte y el plan es conocido. Hasta diez series más están proyectadas y preparadas para ser rodadas y/o estrenadas a lo largo de los próximos meses (y años). Ms. Marvel, Hawkeye, Moon Knight, She-Hulk... La tendencia sitúa en ellas a personajes que (seguro) veremos en las películas, pero primero pasarán por su propia serie, ante la idea de la presentación oficial y la ampliación del universo marvelita. La pandemia ofreció un descanso a los superhéroes, pero las vacaciones han terminado. Comienza, de nuevo, la rueda de estrenos y hazañas.