¡Cuidado con el león confinado!

FUGAS

DAVID PINTOR

El dibujante David Pintor ilustra en redes sociales la serie de un león que nos pinta una sonrisa (y nos da ideas) en este encierro forzado

17 abr 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Érase una vez, una vez que nunca jamás se había contado, un bicho con corona del que nació un león confinado. ¿Confinado en un piso, en un chalé adosado o en una caja de zapatos? «Más bien, en un espacio abstracto», apunta el dibujante que le hace, día a día, los retratos. Este león tiene Facebook (asómense a verlo a las redes del ilustrador David Pintor) y siempre, o casi siempre, le encontrarán conectado. La ley de la selva ha cambiado, lo ha riquiñizado. No lo verán comer carne, ¿será vegano?

«Cuando comenzó el confinamiento me sentí como un león enjaulado y empecé a ilustrar este encierro», apunta el pintor de este león sin rugido que se ha ganado, en semanas, una afición de latidos en redes sociales. A estas no hay un día que no se haya asomado. ¿Tendrá el león la curiosidad del gato? El león pinta el suelo, como buen león lee un libro, a veces se suma a la cacerolada como algunos ciudadanos, pero no se le ha visto lavarse las manos. Se ha lanzado a hacer bizcochos con su dulce aburrimiento, tiene sueños, se adapta al teletrabajo y reposa su melena en un violín encantado. El pelo está un poco desgreñado. Pero él solito se lo corta con tijera y buena mano. Y de pronto se convierte ¿en el manco de Lepanto? Qué arte tiene el león, solo hay que verlo chutar el papel higiénico para mandarle un aplauso. Es un león doméstico, juega y pasma, y diría que ¡hasta limpia bien el baño! Pero cuidado, que en un descuido les come el corazón de un bocado.