Síndrome visual informático. El último lastre de nuestra salud derivado de las muchas horas que pasamos delante de la pantalla enganchados al último estreno de Netflix o cotilleando Instagram. Tras un verano repleto de largas noches sumergidos en las profundidades de Internet, toca portarse bien en septiembre y seguir una serie de recomendaciones, no en balde, más del 70 % de la población española sufre dolores de cabeza, fatiga visual, sequedad ocular, picor, enrojecimiento de los ojos y visión borrosa por un abuso de los dispositivos electrónicos.
DEMASIADO CENTRADOS
Frente al ordenador parpadeamos cinco veces menos. En situaciones habituales una persona parpadea más o menos cada cinco segundos. Sin embargo hay momentos en los que esta reacción, cuando es involuntaria, disminuye notablemente. El caso más llamativo es el momento en el que estamos concentrados frente al ordenador, y es que las tareas que desarrollamos (aunque sea una búsqueda de información de lo más banal) provocan que parpadeemos cinco veces menos de lo que lo haríamos en otro contexto. Esto suele acabar con sequedad ocular y, si pasa mucho tiempo sin que cerremos los ojos, comienza a notarse pesadez, irritación y enrojecimiento ocular.
MIOPIZACIÓN
La miopía ya no es solo hereditaria. Según explican los expertos, los cambios de rutinas, que hacen que realicemos más actividades delante de una pantalla, en lugar de pasar tiempo al aire libre, provocan que se esté desarrollando una tendencia a la miopización bastante más acusada que hace unos años. Los factores hereditarios siguen siendo predominantes, pero el sobreuso de dispositivos electrónicos también influye. De hecho, la Organización Mundial de la Salud ya ha alertado de que en el 2050 la mitad de la población mundial tendrá miopía.
EN CASO DE DUDA, TELEVISIÓN
Es menos dañina para los ojos. Para reducir la fatiga visual no hace falta volverse menonita y vivir al margen del mundo digital. De hecho, con cambiar algún que otro hábito reducimos bastante el cansancio ocular, que puede acarrear problemas mucho más graves. El oftalmólogo Carlos Méndez aconseja lo siguiente: «Hay mucha diferencia entre ver una película en televisión y hacerlo en la pantalla de un ordenador. Cuando la vemos en la tele, lo normal es estar al menos a varios metros del dispositivo, y de esta manera no forzamos tanto la musculatura ocular como cuando utilizamos un PC para ver una serie o filme».
VIDEOJUEGOS A UN LADO
Lo que pasa más factura. En España hay alrededor de 15 millones de personas que juegan una media de 6,5 horas semanales a la consola. Estos jugadores son más proclives a desarrollar miopía o pequeños grados de astigmatismo, todo esto derivado del síndrome visual informático. Lo recomendable, por descontado, es reducir el número de horas que uno pasa con los videojuegos, pero los expertos recomiendan hacer uso de lágrimas artificiales o toallitas para la higiene de párpados. Por otro lado, los jugadores suelen ser personas jóvenes, el grupo menos preocupado por revisarse la vista, así que especial ojo con acudir rigurosamente a la consulta del oftalmólogo.