Un alcalde francés irá a la cárcel por chantajear a un rival potencial con un vídeo sexual

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

Coche patrulla de la Gendarmería francesa, en una imagen de archivo.
Coche patrulla de la Gendarmería francesa, en una imagen de archivo. PHILIPPE WOJAZER | REUTERS

El regidor contrató a un prostituto para que tuviera relaciones sexuales con la víctima con el fin de grabarlas y usarlas para extorsionarle

01 dic 2025 . Actualizado a las 13:45 h.

El alcalde de la ciudad francesa de Saint-Etienne, Gaël Perdriau, fue condenado este lunes a cinco años de prisión por haber chantajeado a su adjunto, al que consideraba un rival potencial, con un vídeo en el que este mantenía relaciones sexuales con otro hombre y que fue resultado de un montaje.

El Tribunal Correccional de Lyon sentenció en concreto a Perdriau, de Los Republicanos (LR, el partido de la derecha tradicional) a cuatro años de cumplimiento efectivo entre rejas y uno más exento de cumplimiento (solo se le aplicaría en caso de reincidencia), así como a su inhabilitación inmediata para ejercer cargos públicos durante cinco años.

Los jueces lo declararon culpable del delito de chantaje, pero también de asociación de malhechores y de malversación de fondos públicos; y la presidenta del tribunal, Brigitte Vernay, citada por los medios, subrayó al leer la sentencia «la extrema gravedad de los hechos», teniendo en cuenta «el deber de ejemplaridad» de un primer edil.

«Esta decisión es incomprensible», declaró en su primera reacción a la prensa Perdriau, que anunció que ha pedido a sus abogados que presenten un recurso inmediatamente.

Junto a él, también fueron condenados a penas de cárcel por haber participado en la operación el que fue su director de gabinete, Pierre Gauttieri, el antiguo concejal de educación, Samy Kéfi-Jérôme, y el que fue pareja de este, Gilles Rossary-Lenglet, que fue quien tuvo la idea para tender la trampa.

La víctima de este chantaje fue el que era el número dos del Ayuntamiento, Gilles Artigues, al que se grabó el 5 de enero del 2015 con una cámara oculta en una habitación de un hotel de París cuando mantenía relaciones sexuales con otro hombre que se dedicaba a la prostitución, al que había contratado el equipo del alcalde.

El objetivo era hacer presión sobre él para neutralizar sus ambiciones políticas, en especial como potencial candidato a la alcaldía y, según las conclusiones de la sentencia, esa operación estuvo financiada con dinero público mediante subvenciones que se dieron a diferentes asociaciones.

Artigues consideró que con el dictamen del Tribunal Correccional de Lyon «se ha hecho justicia» y ahora todos los habitantes de Saint-Etienne «conocen la realidad de los hechos».

Este político centrista, que era conocido por su oposición al matrimonio homosexual, dijo esperar poder «pasar página» tras un episodio que —hizo hincapié— había trastocado la vida de su familia y la suya propia; y a ese respecto recordó que había intentado suicidarse.

El caso lo destapó en agosto del 2022 el medio de investigación Médiapart gracias a las revelaciones de Rossary-Lenglet.