Yolanda Díaz aclara que derogarán la reforma laboral horas después de decir que «técnicamente» no se podía hacer

José María Camarero MADRID / COLPISA

ESPAÑA

La vicepresidenta segunda Yolanda Díaz, el pasado mes de septiembre en un acto en Santiago
La vicepresidenta segunda Yolanda Díaz, el pasado mes de septiembre en un acto en Santiago XOAN A. SOLER

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, pide no preocuparse «por la semántica»

04 nov 2021 . Actualizado a las 13:55 h.

La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha recalcado que sí se van a derogar partes de la reforma laboral del PP y que el Ejecutivo de coalición no se limitará solo a eso dado que va a emprender una «enorme transformación» del marco regulatorio del empleo. Por su parte, el titular de Consumo, Alberto Garzón, ha llamado a «no preocuparse por la semántica» que se emplea para desmontar la reforma de 2012, pues es perfectamente compatible la dimensión técnica de cambiar unos artículos por otros con el «sentido político» del término derogación.

Así se han manifestado ambos en los pasillos del Congreso preguntado en referencias a las palabras de anoche de la propia titular de Trabajo, quien en una entrevista a La Sexta dijo que «técnicamente» no se puede derogar la reforma laboral, dado que era una normativa «expansiva que afectó a más de 20 preceptos del Estatuto de los Trabajadores, a varios reales decretos y directivas».

Cuestionada sobre si quedaba desterrado el término derogar, Díaz ha respondido de forma tajante que «no» dado que el Gobierno va a «emprender una enorme transformación» del marco normativo laboral. «Lo que implica derogar unas partes de la reforma laboral del PP y transformar otras», ha ahondado.

El mensaje televisivo de la vicepresidenta

Horas antes a este nuevo giro semántico, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, matizaba que «técnicamente» no se puede derogar la reforma laboral y confirmaba que la nueva norma en la que trabajan Gobierno y agentes sociales no va a «tocar» los días de indemnización por despido que aprobó el PP en el 2012.

«¿Técnicamente se puede derogar la reforma laboral del Partido Popular? No, porque fue una reforma expansiva que afectó a más de 20 preceptos del Estatuto de los Trabajadores, a varios reales decretos y directivas», aclaró la vicepresidenta en una entrevista en La Sexta,  después del comunicado del Ejecutivo en el que se expresaba el compromiso «con la derogación de la reforma laboral en los términos del acuerdo de coalición y del Plan de Recuperación» enviado a la Comisión Europea.

Previamente, Díaz señaló que la intención de su departamento es hacer una legislación laboral que vaya «mucho más» allá de la derogación y recordó que la reforma del PP provocó, a su juicio, «una enorme devaluación salarial, desequilibró la capacidad de negociación de trabajadores y empresarios» y convirtió a España en un país «con un trabajo precario».

Según la ministra, desde que el Ejecutivo de Rajoy aprobase en el 2012 la reforma laboral, se han registrado en el SEPE «más de 180 millones de contratos», algo que, en su opinión, «no pasa en ningún país». «Uno de cada cuatro de ellos (contratos) tiene una duración inferior a siete días. Esto es imposible para una democracia contemporánea y nos aleja de Europa», ha dicho.

Así, ha reiterado que el Gobierno cambiará «unas normas» del real decreto pero «van a hacer mucho más», porque la reforma será «muy ambiciosa» que hará «la España del futuro». «Tenemos que cambiar un modo de vida que es la precariedad», ha afirmado.

Preguntada por si se va a aumentar la indemnización por despido improcedente en la norma tras la petición de algunos socios del Gobierno, como ERC o Más País, la vicepresidenta ha respondido que este punto no se va a abordar. «No vamos a tocar el despido. Es una reforma equilibrada», ha indicado.

Las palabras de Díaz llegaron el mismo día en el que Gobierno, sindicatos y patronal mantuvieron una nueva reunión para tratar los aspectos susceptibles de ser modificados en la legislación laboral. Fue la primera que se celebró con el último esquema planteado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para zanjar la crisis interna abierta entre las vicepresidentas Nadia Calviño y Yolanda Díaz, con la presencia de ambos departamentos en la negociación.

El encuentro sirvió para tratar de forma monográfica la temporalidad. Se trata de adaptar el artículo 15 del Estatuto de los Trabajadores -el que define esas modalidades- para acabar con la eventualidad excesiva de los contratos del mercado laboral español.

Los negociadores de la mesa laboral abordaron ayer la temporalidad en torno a la idea del Ejecutivo de limitar los contratos temporales al 15 % de la plantilla o la de eliminar el contrato de obra y servicio, con lo que se mantendrían solo los eventuales por circunstancias de producción y los de interinidad. Trabajo está abierto a modificar ese porcentaje del 15 %. Así lo dijo antes de la reunión el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, quien precisó que habrá que ver si ese límite de temporalidad máxima «se acomoda a los intereses del conjunto de interlocutores, si puede variarse o individualizarse para que sea menos indiscriminado y más efectivo».