A quince aciertos de ser español

mateo balín MADRID / COLPISA

ESPAÑA

En el prototipo de prueba del Instituto Cervantes para los aspirantes a la ciudadanía española se pregunta por Luis Rojas Marcos y Manolo Blahnik

11 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El marroquí Mohamed M., de 34 años, reside de forma legal en España desde octubre del 2001. Casado y con dos hijos nacidos en El Vendrell (Tarragona), tiene permiso permanente desde octubre del 2006 y una vida laboral de cuatro años. Su mujer logró la nacionalidad española, pero él no pasó las pruebas de conocimiento e idioma en el 2011 y el juez del registro civil concluyó que no estaba «integrado en la sociedad». El Ministerio de Justicia informó de forma negativa, pero Mohamed recurrió a la Audiencia Nacional.

La respuesta del tribunal no varió y en julio pasado desestimaron la apelación. Su abogada argumentó la larga residencia, la ausencia de antecedentes penales y la pericial médica de que su cliente tiene trastorno de personalidad. También recuerda que no se le puede fustigar porque en una cuestión sobre el sistema de Gobierno en España respondió que es «una dictadura», una muestra para la Justicia de su ignorancia de la realidad nacional.

Este padre de familia es una de las más de 33.000 personas a las que ese año les denegaron la nacionalidad frente a las más de 90.000 que la obtuvieron. La prueba de conocimiento siempre estuvo cuestionada porque no existía un temario oficial para prepararla, por lo que las preguntas quedaban al albur del juez de turno.

El exministro Alberto Ruiz-Gallardón avanzó a comienzos de su mandato que reformaría la disposición que regula la adquisición de la nacionalidad española por residencia. Quería acabar con la «discrecionalidad» de los exámenes. Y encomendó al Instituto Cervantes la realización de la prueba de conocimiento de la cultura española para extranjeros y pidió a un grupo de expertos que preparara un manual de conocimientos constitucionales y socioculturales. El vademécum vio la luz esta semana y el jueves ya será de obligada lectura para la adquisición de la nacionalidad española por residencia. Lo regula la Ley 19/2015.

Temario y prueba

El manual del Cervantes recoge una descripción general de la prueba y 300 preguntas clasificadas para los exámenes del 2015. El cuestionario se compone de cinco tareas con 25 preguntas, para ser contestadas en 45 minutos. Hay dos grandes bloques temáticos: Gobierno, legislación y participación ciudadana en España (que tiene un mayor peso en la prueba, con el 60 % de las preguntas) y Cultura, historia y sociedad españolas (que representa el 40 %). La puntuación máxima que se puede obtener es de 25 puntos. Para superar la prueba, y obtener la calificación de apto, es necesario responder correctamente a 15 de las 25, lo que significa el 60 %.

A las clásicas cuestiones sobre sistema de Gobierno, legislación, geografía, literatura o historia se suman preguntas sobre cultura general. En este campo no es de extrañar que a las 130.000 personas que el pasado año hicieron la prueba les interpelen sobre nombres como los cantantes Miguel Bosé y Alejandro Sanz, la pareja de actores Javier Bardem y Penélope Cruz, el psiquiatra Luis Rojas Marcos, la jugadora de bádminton Carolina Marín, el cocinero José Andrés o el diseñador de zapatos Manolo Blahnik.

En contra de lo que se supone, estas preguntas tienen un mayor porcentaje de aciertos.