Ciudadanos ya lidera la oposición

C. R. BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

QUIQUE GARCÍA | EFE

Albert Rivera busca que el éxito electoral en Cataluña catapulte al partido en el resto de España como impulsor del regeneracionismo

30 sep 2015 . Actualizado a las 22:17 h.

Ciudadanos, una de las triunfadoras en las elecciones catalanas del 27S, ya ejerce como primera fuerza de la oposición. El partido naranja, que obtuvo 25 escaños el pasado domingo (tenía nueve) y se impuso en algunos de los feudos tradicionales del socialismo en el área metropolitana, tiene prisa por que se visualice su nueva posición en la política catalana, en la que ha pasado de ser la penúltima fuerza en la Cámara catalana a la segunda y la primera en lo que respecta al bando constitucionalista.

Sin que se haya constituido el Parlamento catalán, para lo que aún queda casi un mes, trata de erigirse ya en el referente contra Junts pel Sí. De ahí, que la formación naranja emplazara ayer a PSC, Catalunya sí que es Pot y a PP a sellar una alianza en torno a diez puntos programáticos y de compromiso por la unión, la regeneración democrática y la igualdad de oportunidades. «Es la hora del diálogo, las urnas nos han dado la responsabilidad de mediar y consensuar en beneficio de los ciudadanos», afirmó la candidata de Ciutadans, Inés Arrimadas, tras la reunión de la ejecutiva del partido, celebrada en Nou Barris, para escenificar que ya son la primera fuerza en el cinturón rojo, ahora llamado naranja, y donde Podemos y Ada Colau iniciaron en el mes de mayo su conquista del ayuntamiento de Barcelona.

Las diez propuestas de Ciudadanos pasan por fomentar las políticas de empleo, implantar la transparencia para una reducción de la corrupción, impulsar una nueva ley electoral más justa, mejorar servicios fundamentales como la educación o la sanidad, impulsar medidas de ayudas a la clase media trabajadora y a los autónomos y garantizar la unión y la convivencia en Cataluña. «Nos hemos puesto manos a la obra para liderar el cambio en Cataluña», expresó Arrimadas.

La iniciativa, que buscaría un acuerdo de investidura, no tiene ninguna posibilidad de poder prosperar, pero sitúa al partido de Albert Rivera en el centro del bloque antisoberanista, supone su estreno como nuevo referente en la oposición, visualiza que ya lleva la iniciativa en el constitucionalismo y le sitúa en el foco, por si al final Junts pel Sí y la CUP no son capaces de ponerse de acuerdo y Mas se ve obligado a repetir elecciones. Ahí sí, Ciudadanos trataría de liderar un cambio político en Cataluña, aunque aún está a años luz de la lista de Mas, que obtuvo 37 escaños más.

Capitalizar

De momento, la formación naranja trata de capitalizar el éxito de casi triplicar su número de diputados en Cataluña para coger impulso de cara a las generales. Albert Rivera se postuló ayer para liderar un «cambio de rumbo en España». «La próxima legislatura será la de las grandes reformas de Estado», dijo. Y en ese contexto, el dirigente naranja cree que Ciudadanos es «la única alternativa que puede plantear un programa electoral ambicioso y con propuestas viables y sensatas para dar un vuelco a la política actual en beneficio de la regeneración democrática», una referencia velada a Podemos, con la que se disputa la medalla de bronce en la política nacional y a la que en las catalanas derrotó en sus feudos, el área metropolitana y en concreto en Nou Barris. «Nos hemos reunido en Nou Barris por algo que se entenderá rápidamente: Ciutadans ha convertido el cinturón rojo en el cinturón naranja. Ciutadans ha ganado en Nou Barris, un distrito muy poblado, de clase media y trabajadora» dijo Rivera. «Ciutadans es hoy una alternativa de Gobierno», advirtió.

Tras el éxito del domingo de Ciudadanos en el partido creen que están en disposición de adelantar a Podemos como tercera fuerza en España.