Los escándalos y los errores de Ana Botella

La Voz

ESPAÑA

El «relaxing cup», la tragedia del Madrid Arena o las peras y las manzanas para oponerse a la homosexualidad han sido algunos de los momentos más polémicos de la alcaldesa

09 sep 2014 . Actualizado a las 20:46 h.

Ana Botella ha anunciado que no se presentará como candidata del PP a las próximas elecciones municipales para convertirse una vez más en alcaldesa de Madrid. La marcha de la mujer del expresidente del Gobierno, José María Aznar, sin duda será notable. Ella ha sido una de las populares que más ha dado que hablar con sus gazapos, sus polémicas declaraciones y su férrea defensa de las decisiones de su partido.

Relaxing cup of café con leche

Si hay una frase que llevará directamente a Ana Botella a los libros de historia será la de su memorable discurso en la presentación de la candidatura de la capital madrileña para el 2020 ante el Comité Olímpico.

Su irrepetible «relaxing cup of café con leche in Plaza Mayor» eclipsó por completo toda la candidatura de la capital para los Juegos Olímpicos. Pero no fue lo suficientemente gracioso como para sufragar los para finalmente llevarse el megalómano proyecto a casa.

El spa en plena crisis del Madrid Arena

La muerte de cinco jóvenes en Madrid en una fiesta de Halloween que doblaba el aforo permitido en el Madrid Arena, ha supuesto todo un terremoto en el Ayuntamiento de la capital. Mientras que la popularidad de la alcaldesa caía en picado, acusada de haber disfrutado en Lisboa de un «viaje privado» de descanso, la crisis por la tragedia llegaba a magnitudes preocupantes.

Ella misma siempre descartó dimitir a causa de las irregularidades del recinto y nunca se disculpó por su visita al spa.

Tampoco parecía haberle importado el hecho de que todos sus colaboradores, a los que respaldó una y otra vez, resultaran finalmente imputados. El vicealcalde Miguel Ángel Villanueva, los concejales Pedro Calvo y Antonio Guindos y los responsables de la empresa del Madrid Arena acabaron por engrosar las listas de acusados de un juicio que se celebrará en otoño del 2015.

El PP, el mayor progreso de la humanidad

Mientras las calles de Madrid sobrevivían al hedor que tras de sí dejaba la huelga de barrenderos; la alcaldesa colgaba la medallita al partido con una frase que también se ganó una buena cuota de tuits. «La ideología que ha traído mayor progreso en la historia de la humanidad ha sido la de los que estamos aquí sentados», afirmaba sin reparos la mujer de Aznar.

Pero no era esa la única frase que le valió un sinfín de críticas. Su mala gestión en la crisis de basuras madrileñas acabó por hartar a muchos ciudadanos que con preocupación veían como día tras día los problemas de salubridad se multiplicaban. Sin embargo, la alcaldesa se negó en rotundo a calificarlo como «un problema de salubridad» y lo dejó en un simple «conflicto entre trabajadores y empresarios».

El fin de Nuevas Generaciones

Pero para Ana Botella no todo en el PP es positivo. «Soy partidaria de suprimir las nuevas generaciones de los partidos», manifestaba de forma contundente. Y es que la alcaldesa de Madrid es partidaria, al igual que su compañera Esperanza Aguirre, de que los políticos tengan un trabajo antes de dedicarse a la actividad pública. «La gente con 17 y 18 años tiene que estar trabajando o estudiando, formándose. Siempre se lo digo cuando los veo en un acto: ¿qué haceis aquí?»

Un regalo de la Gürtel para su hija

Para Ana Botella el abono por parte de la trama Gürtel de 32.452 euros para la organización del enlace de su hija Ana y Alejandro Agag no era más que «un regalo de boda».

Prohibidos los mendigos

Un borrador de la polémica Ordenanza de Convivencia Ciudadana, desataba toda una ola de reprobación al incluir una prohibición de la mendicidad a las puertas de supermercados y hospitales. Caso distinto era el de las personas que pedían a la salida de la Iglesia, que no venían referenciados.

Años antes de ocupar el máximo puesto en el Ayuntamiento, Ana Botella ya mostraba su poco gusto por la ocupación de los sintecho de las calles madrileñas. Desde su puesto como delegada de Medio Ambiente, Botella llegó a asegurar que los mendigos que pernoctaban en el centro de la capital eran una «dificultad añadida» para mantener limpia la ciudad.

Una oposición para los músicos callejeros

Ni mendigos ni músicos con poca o ninguna habilidad. Las calles de Madrid además de estar limpias de basuras también debían de estarlo de otras incomodidades. Por ello, la polémica alcaldesa decidió examinar a todos los artistas callejeros para determinar cuáles podrían seguir actuando en la calle y cuáles no tenían las aptitudes necesarias para divertir a los viandantes madrileños.

Las protestas de Gamonal, un atentado

El conflicto vecinal vivido en el barrio burgalés de el Gamonal, en el que los vecinos se negaron a la construcción de un bulevar, llevó a la alcaldesa de Madrid a condenar las protestas de los habitantes. La verdadera metedura de pata llegó cuando Botella valoró el conflicto como «atentados».

Peras y manzanas

Antes de ser alcaldesa, también copó su cuota de fama. Ana Botella puede presumir de haber sido la primera en el apareamiento frutícola. Su teoría sobre la homosexualidad se ha hecho más popular que algunas de las doctrinas más importantes del mundo. «Si se suman una manzana y una pera nunca pueden dar dos manzanas», arremetía la alcaldesa de Madrid contra la ley de matrimonio homosexual.

Sin embargo, la dirigente popular no quiso hacer ningún mal con sus palabras, ya que ella misma declaraba años atrás en la revista Vanity Fair tener muchos amigos gais «igual que todo el mundo».