PP y PSOE refuerzan sus ataques a los minoritarios en la recta final

Gonzalo Bareño Canosa
Gonzalo Bareño MADRID / LA VOZ

ESPAÑA

Los pequeños no se han desplomado tanto como preveían Génova y Ferraz

23 may 2014 . Actualizado a las 11:42 h.

«Nunca han acreditado nada». «Caben todos en una maleta». La consigna inicial del PP y el PSOE era ignorarlos para no darles bazas electorales, pero, a la vista de las encuestas, populares y socialistas han endurecido en el final de la campaña sus ataques contra los partidos minoritarios. En los cuarteles de Génova y de Ferraz advertían antes de empezar la carrera de que los grandes resultados que los sondeos atribuían a los minoritarios, especialmente a UPyD y a Izquierda Unida, se iban a desinflar en cuanto se iniciara la verdadera contienda. Y se mostraban convencidos de que, aunque las dos grandes fuerzas podrían retroceder algo, el bipartidismo se mantendría fuerte.

Los sondeos realizados con la campaña ya en marcha han demostrado que, aunque los pequeños rebajan algo sus expectativas iniciales, el suflé no se ha desinflado ni mucho menos en la medida en la que esperaban el PSOE y el PP. El discurso enarbolado por IU, UPyD y otras opciones minoritarias asegurando que populares y socialistas son lo mismo en España y Europa parece haber calado en una buena parte del electorado, haciendo daño a los grandes partidos. Y a última hora han saltado las alarmas.

Discurso «muy agresivo»

Ayer, el número dos de los socialistas, Ramón Jáuregui, dejó ver ese nerviosismo al afirmar que no entiende qué «entusiasmos» pueden despertar «partidos pequeños que nunca han acreditado nada» o que «han dicho no, siempre». Y arremetió especialmente contra IU, que según las encuestas subirá a costa del PSOE. «No se puede reivindicar una izquierda fuerte descalificando reiteradamente a la más fuerte de las izquierdas», dijo Jáuregui, que calificó el discurso de IU como «muy agresivo» y aseguró que los dos grandes partidos seguirán «siendo el eje central de la representación política española».

Pero también el PP comprueba que UPyD e incluso Vox pueden arrebatarle no solo votos, sino también escaños. «Un partido con un diputado o dos, en la UE no existe»». Eso es lo que viene señalando Rajoy en sus mítines. Pero en la recta final, ese discurso descalificatorio hacia los minoritarios ha elevado el tono. El PP de Cataluña, al que el discurso de Vox, de Ciutadans y de UPyD hace mucho daño, ha editado un vídeo de campaña en el que asegura que los partidos pequeños están «aislados y divididos» y son «incapaces de formar grupos». La directora de campaña del PP catalán, Dolors Montserrat, fue más lejos y advirtió de que «nadie piense que tres eurodiputados de diferentes partidos que todos juntos caben dentro de un taxi frenarán la independencia y lograrán la recuperación económica».

Lo cierto es que no solo IU y UPyD tienen fundadas esperanzas de experimentar el próximo domingo un crecimiento notable que podría llevarles a triplicar los votos que obtuvieron en las pasadas elecciones europeas, sino que, contra lo que preveían en el PSOE y en el PP, partidos como Ciutadans, Podemos e incluso Vox tienen a día de hoy posibilidades de obtener representación en el Parlamento Europeo. Y que la suma de los dos grandes partidos podría obtener en estas elecciones el porcentaje de votos más bajo desde 1989.