La inversión empresarial apuntala el PIB

G. Lemos REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Ana Garcia

La economía gallega encadena ya dos años con tasas de crecimiento por encima del 3 %

01 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La economía gallega creció un 0,8 % entre julio y septiembre. El producto interior bruto de la comunidad engordó al mismo ritmo al que lo hace el español y, como este, también registró una ligera desaceleración durante la campaña de verano, ya que el incremento fue una décima inferior al registrado en el segundo trimestre del año. Un descenso que no afecta a la evolución interanual del PIB, que mantiene la velocidad de crucero con un repunte del 3,1 %, con lo que Galicia encadena ya ocho trimestres consecutivos (dos años) con un crecimiento anual superior a los tres puntos.

El crecimiento ha permitido crear casi 20.000 empleos en la comunidad en el último año La senda de la recuperación se mantiene gracias al empuje de la demanda nacional, sobre todo por la inversión de las empresas, que aumentó un 5,4 % en el conjunto del país, la tasa más elevada desde finales del 2015. Donde más se incrementa el gasto de las compañías es en el capítulo de bienes de equipo, con un incremento del 6,3 %, 2,4 puntos más que en el trimestre anterior.

La tendencia es idéntica a la que se registra en Galicia, aunque aquí la inversión empresarial avanza con menos fuerza, un 4,9 % anual (más que duplicando, eso sí, el ritmo del trimestre anterior). También tiene menos impulso el consumo de los hogares, que repuntó un 1,2 % en tasa interanual durante el verano, la mitad que en el conjunto del país.

Frente al buen comportamiento de la demanda interna, destaca la pérdida de fuelle del sector exterior. Y es que, aunque las exportaciones crecen más que las importaciones (4,9 y 4 %, respectivamente), las compras al exterior se aceleran mucho más (1,7 puntos) que las ventas (0,5).

En el caso de Galicia, durante el verano cayeron tanto las exportaciones como las importaciones, pero en el resto del país el descenso es mucho más acusado en las primeras, que pierden más de cinco puntos en términos interanuales.

Impacto en el empleo

La consolidación del crecimiento ha permitido afianzar la creación de empleo. Así, según la contabilidad trimestral publicada el jueves por el Instituto Galego de Estatística, el repunte del PIB se tradujo en la creación de casi 20.000 puestos de trabajo en la comunidad (la estadística utiliza como medida los empleos a tiempo completo, una conversión de las horas de trabajo en puestos equivalentes). De ellos, casi el 95 % son asalariados. En el conjunto de España el número de puestos creados en el último año supera el medio millón (501.242), un alza del 2,9 %, nueve décimas más que en la comunidad, donde el ritmo de creación de empleo se ha ido desacelerando en los últimos trimestres.

En Galicia, el mayor repunte de la ocupación se produce en la agricultura, con un incremento de los puestos de trabajo del 3,9 %, cinco décimas más que en la industria y más del doble que en los servicios (1,6 %) y la construcción, el sector que menos crece, con un 1,2 %.

Las reacciones

Para el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, los datos del IGE son la constatación de que la economía gallega cerrará el año por encima de «la barrera del 3 %» en lo que a crecimiento del PIB se refiere, «a pesar de la situación convulsa de Cataluña y su impacto en el conjunto de la economía». Y recordó que el dato supera en siete décimas la previsión inicial de la Xunta para este ejercicio, que pronosticaba un repunte del 2,4 %.

Por su parte, el ministro de Economía, Luis de Guindos destacó que, pese a la desaceleración que sufre Cataluña, el resto del país ha entrado en una «inercia positiva» durante el cuarto trimestre, lo que «garantiza» que la economía cerrará el año con un crecimiento superior al 3 %.

Ante tanto derroche de optimismo, los sindicatos aprovecharon para pedir que la recuperación se traslade, de una vez, a la economía real, mejorando la calidad del empleo, subiendo salarios y reforzando los servicios públicos. «Nuestra economía está inserta en una sólida fase expansiva, contabilizando ya 15 trimestres consecutivos en los que crece la actividad productiva en términos anuales, los 10 últimos por encima del 3 %, y eso debe traducirse en un reparto más justo y eficiente de los frutos derivados de ese crecimiento», señalaron desde UGT.