La dimisión de la cúpula de Caixa Geral salpica al Gobierno luso

begoña Íñiguez LISBOA / E. LA VOZ

ECONOMÍA

M. MORALEJO

La entidad cuenta en Galicia con 35 sucursales en las que trabajan alrededor de dos centenares de personas

29 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La repentina dimisión de Antonio Domingues, presidente de Caixa Geral de Depósitos (CGD), el primer banco portugués, cuyo accionista mayoritario es el Estado luso, ha sido la gota que ha colmado el vaso en la crisis de la entidad. Y ha salpicado directamente al primer ministro, el socialista Antonio Costa, quien busca contra reloj un sustituto para Domingues, al que él mismo escogió.

Al abandono del presidente, que llevaba tan solo tres meses en el cargo, se suman las dimisiones de seis de los siete consejeros ejecutivos del banco luso, incluida la del único español con silla en el órgano de dirección de la entidad, Ángel Corcóstegui, exvicepresidente del Banco Santander Central Hispano.

Para el jefe del Gobierno portugués no va a ser tarea fácil encontrar quien se quiera hacer cargo de la firma, que necesita urgentemente una inyección de al menos 4.600 millones de euros. Costa fue tajante ayer al afirmar: «A pesar de la dimisión de Antonio Domingues continuaremos con la hoja de ruta de la recapitalización del banco». Preguntado sobre si ya tiene sustituto afirmó: «Esta semana confirmaré el nombre del nuevo presidente de CGD». 

Declaración de ingresos

La crisis de las dimisiones estalló en el seno del banco el pasado fin de semana tras aprobarse el pasado viernes en el Parlamento, una ley que entrará en vigor pasado mañana y que obligará a todos los miembros del consejo de administración de Caixa Geral a entregar en el Tribunal Constitucional sus declaraciones de la renta.

Domingues era hasta su llegada a CGD el presidente del Banco Portugués de Investimento. La polémica comenzó cuando se supo que iba a cobrar 30.000 euros al mes por dirigir Caixa Geral y subió de tono cuando hace unos días varios periódicos portugueses publicaron que, trabajando todavía en el BPI, viajó a Bruselas para negociar junto con el ministro de Finanzas luso, Mario Centeno, la recapitalización de CGD. La oposición de centro derecha, el PSD de Pedro Passos Coelho, el anterior primer ministro, y el CDS-PP, de Assunção Cristas, no tardaron en criticar los hechos en el Parlamento.

Esa presión mediática y el hecho de no haberse sentido lo suficientemente apoyado por el presidente de la república, Marcelo Rebelo de Sousa, y el primer ministro, Antonio Costa, son, según la prensa portuguesa, las razones de su dimisión. 

35 oficinas en Galicia

Caixa Geral de Depósitos cuenta en Galicia con 35 sucursales -la mayoría en la provincia de Pontevedra- en las que trabajan alrededor de dos centenares de personas.