El conflicto en Santiago vacía los Dia y tensa la negociación

Rubén Santamarta Vicente
rubén santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

La falta de concreción en el precio y el bloqueo a los supermercados, grandes escollos para firmar

11 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Las tres patas del negocio lácteo llegaron a la sede del ministerio en la madrileña plaza de Atocha con posiciones muy divergentes. Por ello el avance logrado ayer se puede ver como un éxito. La botella (de leche) medio llena. Y así lo vendió ayer la ministra, la principal interesada en presentar el pacto tras las semanas de tensión en Galicia (sobre todo aquí), Asturias, Castilla y León, que se apresuró a anunciar un acuerdo que no es tal. Es un avance. Porque un avance es que la distribución está dispuesta a establecer «medidas concretas que no banalicen los productos lácteos ante el consumidor»; que se puede traducir como no utilizarla como reclamo. Y un avance es también que la industria se disponga a aceptar un «precio sostenible». Pero sigue siendo un obstáculo esto mismo: que no se concrete qué es eso y si de forma inmediata comenzarán a repuntar las tarifas que se pagan a los ganaderos. Teniendo en cuenta que hay contratos de compra de leche firmados a 12 meses, parece algo complicado de gestionar ese hipotético incremento. En todo caso, el papel que se pueda llegar a firmar no puede incluir una cifra mínima a pagar, porque eso chocaría con la legalidad. De ahí que sea importante fijar qué es eso de un «precio sostenible».

Este sigue siendo el gran obstáculo para firmar. El otro lo sigue dejando claro la distribución: no al boicot a áreas comerciales. La cadena Dia lleva tres jornadas con su centro logístico de Santiago bloqueado por los ganaderos, y sus supermercados tienen problemas de suministro, como lo atestigua un paseo por varios de ellos en Ferrol, Ourense, Santiago o A Coruña: escasean carnes, frutas y yogures. Fuentes de la distribución sostienen que, mientras no se levante ese cierre, no se puede avanzar mucho más. Dia es socio de esas patronales, y los ganaderos amenazaron con hacer lo propio con otros de sus aliados: Gadis, Mercadona o Vegalsa (Eroski y Familia). Sin embargo, en la asamblea de anoche en Lugo se informó de que los tractores se estaban retirando de los centros de distribción de Santiago.

Con información de B. Couce, Brais Capelán y Olga Suárez.