Javier Cañas Caramelo: «Es el peor momento del textil, pero nunca nos rendiremos»

Rubén Santamarta Vicente
RUBÉN SANTAMARTA REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Cañás, frente a una de sus colecciones, en la planta que la empresa tiene en el polígono de Sabón (Arteixo).
Cañás, frente a una de sus colecciones, en la planta que la empresa tiene en el polígono de Sabón (Arteixo). MARCOS MÍGUEZ< / span>

El veterano empresario apuesta por abrir el negocio al exterior y recuperar al cliente orgulloso del buen vestir

14 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Javier Cañás cumple un decenio al frente de Etiem, su último proyecto en el mundo del textil gallego, terreno en el que se mueve con suma comodidad; lleva 50 años dedicados a un negocio que hoy se encuentra en la encrucijada, buscando su sitio entre la moda low cost y la alta costura. «Para nosotros es un motivo de orgullo seguir existiendo con todo lo que ha pasado en la economía mundial y española. En el textil se ha ido al garete tanta industria buena... El textil gallego era líder en España, pero vino la tormenta y ha machacado el 90 % de las empresas. Es un milagro estar aquí, y casi todos los años con números negros. Queremos continuar y crecer, y hacer venta a nivel internacional».

-¿La solución está fuera de España? ¿No es un desafío mayor?

-En Etiem ya estábamos haciendo algo hace tiempo, pero muy poco, no le habíamos dedicado todo el tiempo que requiere a la exportación, por errores quizá nuestros o por pensar que en momentos difíciles no debíamos salir. Ahora parece que la cosa está mejor y estamos retomando. El 90 % del negocio es España, pero tenemos algo en México, en Grecia, que en estos momentos está como está, en Bélgica, hemos ido a Alemania, estamos en Portugal... Ocurre que el mercado mundial ha sufrido una transformación, que la mentalidad de la gente ha cambiado, que ya no preocupa ir mejor o peor vestido. Hay países de primer nivel que han pasado bastante del vestir. Y a la vez, no tenemos una marca consolidada. Justo cuando estábamos empezando nos pilló la tormenta; pillamos dos días de sol y siete años de tormenta. Pero, insisto, seguimos aquí.

-Su sector ha sufrido bastante, y aún lo hace, también en Galicia. Se sigue hablando de despidos, de traslado de producción... ¿Qué le pasa al textil, fuera del fenómeno Inditex?

-Pasa que a la clase media alta lo que menos le importa ahora es la ropa, tiene otras preocupaciones, otro tipo de consumo: cambiar el teléfono, la tableta... Las nuevas tecnologías atraen más que comprar un traje. A la gente ya no le importa ir vestida de cualquier manera. Hay otros países donde sí les sigue importando, que valoran el buen paño, la buena confección. En España ha triunfado el low cost. Y eso ha hecho desaparecer a las empresas. Esto es una cadena: desaparecen  las tiendas de tipo medio alto y el fabricante que vendía sufre el gran batacazo. Pero no ha pasado solo en el textil. Hablas con el del mueble y te dice lo mismo. 

-Será que tenemos menos ingresos y hemos ido a priorizar otros gastos...

-Es más lo último que la falta de dinero. Sí, hay gente que no puede comprar de nada, pero hay otra mucha que sigue manteniendo unos ingresos, pero ha caído en la compra de baja calidad en el textil, porque el precio le llama la atención. El cambio de mentalidad en el consumo es el gran problema en este negocio, porque aquí crisis ha habido siempre, pero en otros momentos la gente deseaba comprar buena ropa. Ahora no sucede eso. 

-Para usted, que nació entre costuras, y que dice que siempre ha habido crisis ¿el actual es el peor momento del sector?

-Sí, porque no tienes adonde ir. El problema no es la creatividad, es que las tiendas multimarca que había en toda Europa han desaparecido. Ha habido una evolución a tiendas de marca propia, de bajo coste, y ese es el problema. Y no ves una reacción. Pero el mundo es muy grande y hay que moverse. Las cosas están mal, pero no hemos bajado los brazos nunca, nunca nos rendiremos. 

-Tienen como vecinos, en el polígono de Sabón, a Inditex. ¿Qué es para Etiem? ¿Un referente? ¿Un competidor?

-Es un mundo diferente, estamos orgullosísimos de poder decir que somos vecinos, y buenos amigos, pero ellos llevan su camino. Claro que te afecta, pero no es nuestro competidor. 

-Ustedes hacen prácticamente todo aquí, en Galicia y en el norte de Portugal. ¿No se han planteado irse a Asia, a África, como otros competidores?

-Allí hacemos algo, pero muy puntual. Nosotros queremos hacer producto de calidad, y es mejor tenerlo todo cerca porque lo controlas mejor. Puedes hacer una camiseta, sí, pero no un traje. Ese es nuestro valor añadido.