Un informe de la CNMV revela que Bankia benefició a unos clientes de preferentes a costa de otros

Efe

ECONOMÍA

«Se observa un claro conflicto de interés entre los clientes que compraban las emisiones y los que las vendieron»

11 abr 2013 . Actualizado a las 20:40 h.

La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) asegura en un informe que Bankia, Caja Madrid y Bancaja beneficiaron a unos clientes en perjuicio de otros, a los que vendieron las participaciones preferentes de las que se deshacían los primeros a precios «alejados de su valor razonable».

«Se observa un claro conflicto de interés entre los clientes que compraban las emisiones y los que las vendieron, puesto que su valor razonable era muy inferior a aquel al que se realizaron las transacciones», señala el informe, fechado el pasado 11 de febrero y a raíz del que se propuso al Comité Ejecutivo de la CNMV que valorara iniciar un expediente sancionador a las citadas entidades.

Los autores del informe, que ha sido incorporado a la causa sobre Bankia que instruye el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, afirman también que el conflicto de interés no solo afectaba a las operaciones entre clientes, «sino que se extendía también a la actuación de las entidades».

«Éstas, al permitir que la operativa descrita se produjera, se veían beneficiadas, ya que así evitaban la existencia de posibles reclamaciones y denuncias por parte de los clientes vendedores (falta de liquidez, mala información en la compra, etc.), el consiguiente perjuicio reputacional e incluso la potencial pérdida de clientes», dice el escrito.

La conclusión es que Bankia, Caja Madrid y Bancaja «incumplieron de forma no aislada o puntual» el artículo de la Ley del Mercado de Valores que obliga a las entidades a «organizarse y adoptar medidas para detectar posibles conflictos de interés entre sus clientes y la propia empresa o su grupo».

«Las entidades no establecieron ninguna medida destinada a impedir que los conflictos de interés señalados perjudicasen los intereses de los clientes compradores, ni tan siquiera la de revelar previamente la naturaleza y el origen del conflicto a estos clientes antes de actuar por cuenta de los mismos», manifiesta la CNMV.

Así, los compradores se veían perjudicados por el banco o cajas «en beneficio de otros clientes que, de esta forma, conseguían la liquidez deseada y en beneficio de las propias entidades que estaban interesadas en facilitar liquidez a los vendedores».

El informe conocido ahora, que analiza el periodo comprendido entre junio del 2010 y noviembre del 2011, deriva de una revisión de los procedimientos de cruce de operaciones de compra y venta entre clientes minoristas incluida en el plan de actividades de la CNMV que se realizó entre «una muestra de entidades», que el escrito no detalla y de la que formaban parte Bankia, Caja Madrid y Bancaja.