Denuncian que las firmas del Ibex triplican el retraso legal en sus pagos
11 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La morosidad sigue asfixiando a las empresas -estiman que desde el inicio de la crisis, un tercio del medio millón de firmas que han desaparecido lo hicieron por los impagos- y es necesario tomar medidas, otra vez. Esa es la conclusión a la que llega la Plataforma Multisectorial contra la Morosidad (PMcM), que agrupa a patronales de todo el país con casi un millón de empresas asociadas, y que propone, entre otras, la adopción de un régimen sancionador lo suficientemente elevado -con multas de hasta 900.000 euros- como para que resulte disuasorio.
Y es que el último estudio realizado por el colectivo constata que las empresas del Ibex-35, es decir, las que cotizan en el selectivo español, pagaban a sus proveedores en el primer semestre del pasado año con un retraso medio de 215 días, lo que triplica el tope máximo establecido por la ley de lucha contra la morosidad, que para el 2012 era de 75 días y de 60 para el recién estrenado ejercicio.
Desde la plataforma denuncian que, pese a que el Plan de Pago a Proveedores aprobado por el Ejecutivo hace casi un año supuso un «éxito» en cuanto a «rapidez, organización y oportunidad», las facturas impagadas del 2012 tanto en el sector público como en el privado están volviendo a acumularse.
En el caso de las firmas del Ibex, por sectores, el que mayor morosidad acumula es el de la construcción e inmobiliario, que superaba los 300 días de retraso en la primera mitad del pasado año. Le siguen servicios y comercio, con 234 días de media; la industria, con 216, y el sector de la energía, con 100 días.
La PMcM afea, además, tal comportamiento de las grandes empresas, ya que contrasta con los períodos de cobro que estas realizan a sus respectivos clientes, y que son «notablemente menores»: de 136 días en el sector de la construcción, 69 en servicios, 89 el industrial y 100 en el de la energía.
Financiación forzosa
«Estos datos evidencian que algunas de estas grandes compañías se financian, en cierta manera, a costa de sus propios proveedores, en su mayoría pymes y autónomos», denuncia el portavoz de la plataforma, Antoni Cañete, si bien admite que, según el informe de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en el que se han basado para su estudio, se constata «un descenso de casi el 12 %» en los plazos de pago a proveedores por parte de las grandes compañías respecto al año anterior, probablemente como consecuencia de la puesta en marcha de la reforma de la ley de lucha contra la morosidad.
Aún así, la plataforma entiende que es esfuerzo es insuficiente y que los retrasos en los pagos se están llevando por delante a multitud de pymes y autónomos. Por ello, instan al Ejecutivo a establecer un régimen sancionador, con multas «ejemplarizantes» de hasta 900.000 euros, así como a crear un Observatorio de la Morosidad que permita monitorizar «con rigurosidad» el comportamiento de los pagos. También defienden que se aplique el criterio de caja en el devengo del IVA de pymes y autónomos, es decir, que no tengan que abonarlo hasta haberlo cobrado, medida esta última aparcada por el Gobierno, pese a ir en el programa electoral.