El acusado, vecino de Cangas de Onís, se aprovechó de la vulnerabilidad de la víctima, con secuelas tras un accidente, y le hizo creer que un supuesto contacto en Tráfico podía ayudarle a recuperar la licencia
El registro de los juzgados se colapsó con 800 escritos en un fin de semana por el temor de los bufetes al cambio de ley que les obliga a celebrar una conciliación antes de ir a juicio