El experto dice que hay que tratar de no salir de la crisis desplumados
14 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Blas Calzada Terrados (Valladolid, 1937) es un hombre moderadamente optimista. Eso no quiere decir que no pinte un panorama económico desolador. El presidente del Comité Asesor Técnico del Ibex y expresidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) dice que las políticas económicas deberían asistir más aún a las empresas, eliminando, por ejemplo, el Impuesto de Sociedades. El economista está convencido de que el crecimiento no llegará a través del consumo.
-Venía con otra idea de arranque, pero leo que el Fondo Monetario Internacional alerta de la fuga de capitales en España a gran escala; lo que faltaba. ¿Por qué se van?
-No es tal fuga. Es solo que la inversión de los extranjeros ha disminuido y se llevan sus cosas. Es un problema, por supuesto, pero no lo que entendemos como fuga de capitales. También hay quien piensa que el euro va a fracasar, que puede haber un cambio de moneda y que eso les puede perjudicar.
-¿Y cree que eso pasará?
-Yo no, pero muchos sí.
-El FMI también pronostica la prima de riesgo a 750, caídas brutales del Producto Interior Bruto... ¿Son apocalípticos o saben lo que se dicen?
-Las previsiones económicas hechas, sobre todo, desde Washington, son como son, y se equivocan muchas veces. Pero lo que sí quiere decir de alguna manera el FMI es que los brotes verdes no se ven claros, por decirlo de una manera que todo el mundo reconoce.
-Corríjame si me equivoco: el gran problema de nuestra economía es que no crecemos. ¿Cómo crecemos si no tenemos con qué?
-Eso es. Es complicadísimo. Tenemos un ahorro relativamente pequeño porque producimos poco y, en esa situación, crecer es muy difícil. Un momento así exige una política económica muy fina, que no sé si estamos en condiciones de hacer, yo creo que no. Esa política fina debería orientarse a que el ahorro disponible se oriente a devolver lo que debemos, porque no tenemos más remedio, pero también a invertir en cuestiones fundamentales, en nichos fundamentales.
-Por ejemplo...
-En las empresas. Hay que lograr que lo que ahorran las empresas no se lo lleven los impuestos.
-En Galicia, el problema de las preferentes no es menor. ¿Se arreglará?
-Hay gente a la que, evidentemente, la han engañado, y eso no se puede arreglar más que demostrando que, efectivamente, han sido engañados y haciendo responsable a la entidad que lo ha hecho. Pero también hay muchas personas que sabían los riesgos que corrían, hay que hacer una distinción muy fina. Desde el punto de vista internacional, devolver dinero a una inversión que, al fin y al cabo, es de riesgo, supondría precedentes muy malos y por eso, en cierta manera, la UE se opone.
-No son pocos los que no entienden por qué hay que salvar a los bancos antes que a los ciudadanos...
-A los bancos hay que protegerlos no porque sus accionistas sean muy simpáticos o sus ejecutivos muy buenos. No se protege a los banqueros, sino a los impositores, a la gente, a los ahorradores.
-¿Aprenderemos algo de este momento?
-Nada. El momento es tremendo. Hay que acertar con las medidas, y no es sencillo. Estamos en una siutación en la cual hemos hecho todo mal y tarde, hasta los movimientos sociales son terribles. Y sabíamos que esto iba a pasar; el que no lo viera venir es que no sabe de economía.
-¿Vamos a salir de esta? Vivos, quiero decir...
-Sí. Pero hay que intentar salir con las mayores plumas posibles. ¡Claro que salimos! Hay que procurar que no se dañe mucho la estructura ni política ni social y conseguir que la gente que está sufriendo ahora deje de sufrir cuanto antes, eso es lo más importante.
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