Tablas rotas y una valla ante el Concello de Vila de Cruces por el cierre del puente de A Balsiña
VILA DE CRUCES
El paso está cerrado desde enero por encontrarse en mal estado
11 jun 2025 . Actualizado a las 05:00 h.El consistorio de Vila de Cruces amaneció el pasado lunes con una valla, restos de tablas y cintas de plástico delante de la puerta de acceso. El motivo de esta insólita imagen está detrás del cierre del puente de A Balsiña, en la parroquia de Toiriz. Como protesta por la lentitud en las obras y los prejuicios que conlleva a los vecinos del entorno, una vecina colocó estos materiales como recordatorio para el gobierno municipal de que la situación se está tornando insostenible ante el retraso en los trabajos.
El Concello salió al paso este martes, dando cuenta de la protesta de la vecina «nunha acción que demostra o malestar polo peche desta infraestrutura». No obstante, el gobierno local censuró esta reivindicación destacando «a gravidade de ditos actos ao retirar o precinto que amosaba o perigo de cruzar a ponte». De hecho, sostienen que «o que se puido propiciar é que a xente que pasara por aquel lugar cruzase a ponte ao pensar que non había ningún perigo».
Asimismo, el Concello de Vila de Cruces recordó que ese acceso no es el único para llegar al negocio situado en las inmediaciones —y propiedad de la vecina que protestó—. «Si é o máis directo, pero polo peche da ponte non queda totalmente incomunicado», aseguran. Además, sostienen también que toda esta información fue comunicada a la afectada.
La Policía Local de Vila de Cruces precintó de nuevo la entrada del puente el lunes por la mañana. El objetivo es advertir del peligro que supone cruzarlo. En vista de la protesta, advierten: «se algunha persoa decide cruzar, será responsabilidade individual de cada unha».
Reproches a Medio Ambiente
El gobierno de Vila de Cruces asegura que la situación está en conocimiento de la Consellería de Medio Ambiente, «a quen se lle comunicou o malestar que o peche da ponte xerou entre a veciñanza». Xuntos solicita a la consellería que esclarezca cuál es el organismo responsable de la reparación de la infraestructura «para poder reabrila o antes posible».
El deterioro del puente motivó que a principios de año el Concello decidiese precintar el acceso. Aseguran que en febrero informaron a Medio Ambiente de esta circunstancia. Sin obtener respuesta, enviaron en abril un escrito a este departamento como a Patrimonio Natural para aclarar la titularidad de la instalación, pues del lado de Agolada aparece un cartel de la Xunta.
Según relata el gobierno municipal, el mes pasado el Servizo Provincial de Patrimonio Natural de Pontevedra contestó al escrito y requirió el cierre del puente, algo que hizo el Concello unos cuatro meses antes.