Otro duelo de una rivalidad eterna

Manuel Sánchez

DEPORTES

Rafa Nadal y el suizo Roger Federer protagonizan en Shanghái su 38 enfrentamiento directo, la décima final del año para el español

15 oct 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Rafael Nadal y Roger Federer escribirán hoy (10.30 horas, Movistar Deportes 2) un nuevo capítulo, el número 38 de su legendaria rivalidad cuando se midan en la final del torneo de tenis de Shanghái. Nadal derrotó hoy al croata Marin Cilic por 7-5 y 7-6 (7-3) para acceder a su décima final de la temporada, mientras que Federer remontó después ante el argentino Juan Martín del Potro y se impuso por 3-6, 6-3 y 6-3. Así, el español y el suizo, dos de los mejores tenistas de la historia, se citan en otra final. Será el cuarto cara a cara de un 2017 en el que uno y otro están rompiendo moldes. Nadal, que nunca ha ganado el título en Shanghái, luchará por levantar el séptimo trofeo del año y Federer, que conquistó este torneo en el 2014, por el sexto.

El español y el suizo se han enfrentado en 37 ocasiones, con 23 victorias para el balear y 14 para el helvético, aunque los cuatro últimos partidos entre ambos se los ha adjudicado Federer. Nadal no logra derrotar al suizo desde 2014, en las semifinales del Abierto de Australia, aunque probablemente está atravesando ahora su mejor momento sobre cemento.

Protagonistas del 2017

Lesionados la segunda mitad de la temporada 2016, los dos estaban hace un año parados, pensando ya en regresar en el 2017. Casi nadie apostaba entonces que fueran a ser los grandes protagonistas del nuevo curso, pero el suizo ganó cinco títulos y el español sumó seis. Entre ambos se repartieron los cuatro Grand Slam y entre ellos está la lucha por el número uno. Nadal, actual líder del ranking, podría asestar hoy un golpe prácticamente definitivo en esa pelea. Si levanta el título de Shanghái, uno de los tres Masters 1000 que faltan en su palmarés, se asegurará prácticamente acabar la temporada en lo más alto de la lista ATP, algo que ya consiguió en el 2008, 2010 y 2013.

«Es bonito vernos a estas alturas de nuestras carreras jugando estos partidos», explicó Federer, de 36 años. «La rivalidad es muy especial. Por nuestros estilos, que son tan diferentes. También la actitud, por cómo afrontamos la vida. Somos diferentes en algunos aspectos. Es uno de los que me han hecho ser mejor jugador. Me hizo trabajar más en mi juego, me hizo volver a las pistas de entrenamiento a pensar qué podía cambiar para convertirme en un jugador mejor», reconoció el suizo tras superar a Del Potro.

Tercera final consecutiva

La racha de Nadal no parece tener fin. Ante Cilic accedió a su décima final del año, la tercera de forma seguida, tras el Abierto de Estados Unidos y Pekín. Y lo hizo ante un rival que durante esta parte de la temporada saca su mejor versión. Con su victoria, alcanzó los 16 triunfos consecutivos y los 871 en el total de su carrera. Está aún lejos de las 1.256 de Jimmy Connors, aunque se queda a tiro de las 877 de John McEnroe.

Además, esta racha sobre cemento empieza a asemejarse a la mejor de la vida de Nadal, cuando entre Miami 2012 y Pekín 2013 acumuló 31 triunfos consecutivos sobre esta superficie. Si gana a Federer sumará su título de Masters 1000 número 31, con lo que desempataría en lo más alto de la lista histórica con Djokovic. Otro reto.