Claramunt también protagonizó una de las conversaciones grabadas por la UCO, en la que se refleja cuál ha sido el modo de operar en la RFEF durante años y el respeto que por la ley se tenía en las altas instancias federativas. En una conversación con Ángel María Villar, Claramunt habla sobre un encuentro amistoso de la selección que se pretendía jugar en Murcia y lo que la directora de la selección le dijo a un tal Edi: «Digo, vamos a ver, vale que no cumplimos la norma de la UCO, tal, tal, tal, pero digo ¿qué quiere el comisario para que hagamos el partido?, me dice que el hotel sea de Murcia y no de alrededores porque así controlamos nosotros la seguridad, digo vale que el hotel será en la ciudad de Murcia, vale, es lo que me pedía a cambio, digo tú vas a hablar con tu jefe y le dices, oye, a partir de septiembre cambiaremos la norma y acoplaremos el tema a la normativa tal, pero escúchame, tú me has dicho a mí, porque es verdad, presidente, tú no tenías jefe porque hay elecciones y tal, pues esto es lo mismo, aquí ahora mandan las elecciones por lo tanto me cago en la normativa y en la Ley del Deporte, me cago, no se ha cumplido en seis meses, se va a cumplir ahora. Así que tú dile ahora a tu jefe confidencialmente que posiblemente sea en Murcia y que a cambio vosotros tenéis el control total de la selección...».
Para la UCO, la conversación a la que pertenece el extracto anterior deja ver «el intento claro de manipulación y de saltarse la normativa vigente de la Sra Claramunt».