Problemas bajo los palos

javier varela MADRID / COLPISA

DEPORTES

Emilio Naranjo | efe

Keylor y Ter Stegen viven su momento más bajo, con muchos goles encajados y fallos impropios de su nivel

05 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

El Madrid y el Barcelona viven en continua comparación. Si habitualmente los focos se centran en Cristiano y Messi, esta vez las miradas se dirigen a la portería. Keylor Navas y Ter Stegen no disfrutan de su mejor momento. El costarricense se encuentra en el punto de mira tras su fallo contra el Legia en el segundo gol y ya ha encajado diez tantos en los siete partidos que ha disputado esta temporada, desde que recuperó la titularidad en Dortmund. Allí le regaló un gol a Aubameyang. En estos siete encuentros recibió un gol cada 63 minutos y parece lejos del portero que deslumbró la pasada temporada.

En el entorno del Madrid ha empezado el runrún sobre Navas, y más, después de que volviera a defender la puerta en sustitución de Casilla, que había firmado un buen inicio de temporada. Con el canterano en la portería el Madrid disputó nueve partidos y encajó diez goles (un tanto cada 84 minutos), pero a su favor tiene que fue salvador en el encuentro ante el Sporting de Lisboa y que los únicos choques en los que el conjunto blanco no ha encajado goles Casilla era el guardameta, (frente a la Real Sociedad y el Espanyol).

Satisfecho con Casilla

Zidane siempre demostró estar contento con Casilla, pero cuando el costarricense se recuperó de su lesión dejó entrever el relevo: «Keylor es un portero importante. Hablaré con él y con Kiko y veré cómo lo organizo. Para mí también existe rotación en la portería». Desde aquel día su portero para las competiciones importantes ha sido Navas. Para Casilla ha quedado la Copa como premio a su trabajo en los entrenamientos. Pero la confianza de Zidane en el costarricense contrasta con la extraña situación que se vive en los despachos del Bernabéu con respecto al guardameta. El club le había prometido la renovación, pero a día de hoy sigue sin firmarse y sin cita para hacerlo.

La apuesta culé

ALBERT GEA

Una situación similar se sufre en la portería del Barcelona, donde Ter Stegen está pasando por su peor momento desde que llegó al conjunto azulgrana. El alemán es el portero por el que el club apostó cuando Guardiola llamó a las puertas del Camp Nou para pescar un guardameta y le permitió la salida a Claudio Bravo. Se hizo el dueño y señor de la portería, pero sus fallos han empezado a ponerle en la picota. Ha recibido cinco goles en los últimos ocho disparos a su portería en los últimos tres partidos y su fallo en el segundo gol del City resucitaron los ataques que parecían haberse olvidado tras la derrota liguera en Vigo.

En los doce partidos que ha defendido la portería del Barcelona, el meta ha recibido doce goles y solo en seis no ha tenido que recoger el balón de la red. Contra el Manchester City, Ter Stegen recibió tres goles en cuatro disparos, mientras que ante el Valencia, este llegó cuatro veces y anotó dos tantos.

Como le ocurre a Keylor Navas, los errores puntuales e individuales de la defensa tampoco le están ayudando. Su entrenador, Luis Enrique, ha mostrado públicamente su apoyo al futbolista alemán: «El portero del Barça tiene que arriesgar. Nos da mucho. Cuando falla no le vamos a matar».

Ter Stegen, sin rival

A diferencia de su homónimo en el Madrid, el azulgrana no tiene rival en el banquillo que le pueda hacer sombra, ya que Cillessen no es una amenaza para quitarle el puesto. Las porterías de Real Madrid y Barcelona seguirán bajo la lupa, pero no parece que de momento vayan a cambiar de propietarios. Los próximos partidos dictarán si Navas y Ter Stegen continuarán con licencia para parar.