Woods se estrella en su vuelta

Paulo Alonso Lois
PAULO ALONSO LOIS REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Woods cabizbajo, una imagen cada vez más habitual.
Woods cabizbajo, una imagen cada vez más habitual. Rob Carr < / span>afp< / span>

Tiger falla el corte en su regreso después de tres meses sin competir

29 jun 2014 . Actualizado a las 06:00 h.

Con una salida al bunker del hoyo 10 del Congressional Country Club de Bethesda (Maryland) regresó Tiger Woods después de más de tres meses sin competir. Desliz en forma de bogey para abrir dos días discretísimos, sin un resultado ni un recurso al que aferrarse, hasta terminar eliminado. Algo iba mal, hasta que por décima vez en su carrera no pasó el corte. Sufrió en el Quicken Loans National, el torneo que organiza su fundación. Y alimenta las dudas de cara al próximo Open Británico de Royal Liverpool. Sin mostrarse apático, no parece el jugador que vivía plenamente involucrado, casi obsesionado, en su misión: superar los 18 grandes de Jack Nicklaus -lleva 14- y convertirse en el más grande golfista de todos los tiempos. ¿Qué plan tenía tras la debacle? «La próxima semana voy a disfrutar con mis hijos de unas breves y agradables vacaciones. Luego nos pondremos en marcha».

Woods ya es otro Woods. A los 38 años, sin grand slams desde el US Open del 2008, no transmite esa fijación por su palmarés. Hasta parece conformarse, o pretende parecer menos exigente, por lo menos. Después de dos días, solo en cuatro de los 18 hoyos del campo evitó algún error, hasta añadir a sus 74 golpes del jueves otros 75 el viernes (+7).

Todo se exagera alrededor de Woods, por lo absolutamente extraordinario de los diez primeros años de su carrera como profesional. Lo que en otros sería desliz, como el resultado del Congressional, en Tiger resulta alarmante porque hubo una época en la que no tenía lagunas como las actuales.

Extrañan hasta las explicaciones que da sobre sus problemas en el campo. Reconocido como un mago del juego corto, no dio una alrededor del green en el torneo que él mismo organiza, el antiguo AT&T National. Y se escuda en que había entrenado en bermuda y no sobre ryegrass, la hierba del Congressional: «Es totalmente distinto. Probablemente debí haber pasado más tiempo chipeando, pero es lo que hay...».

Sin dolor

Woods sigue quinto del ránking mundial. Y se queda con migajas, con sensaciones positivas de las que sus seguidores empiezan a sospechar, pues faltan resultados verdaderamente brillantes. Celebra que golpeó sin molestias el driver, después de dos años conviviendo con el dolor torneo sí torneo no. Pero, a los 38 años, y con un físico machacado en entrenamientos extenuantes, da la sensación de que el reloj biológico vuela en contra de un deportista estratosférico.

La comparación con Nicklaus

¿Qué hacía Nicklaus con 38 años? Los cumplió con 14 grandes, los mismos que Woods tiene hoy, pero el Oso Dorado celebró después otro título en cada uno de los cuatro grandes: el Abierto Británico con 38, el US Open y el Campeonato de la PGA con 40 y el Masters con 46.

Así que para alcanzar ya los 15 grandes, como Nicklaus, antes de celebrar su 39 cumpleaños, en diciembre, Tiger tiene otras dos oportunidades, en julio en el Abierto Británico y en agosto en el Campeonato de la PGA.