Augusta elige el podio del golf

Paulo Alonso Lois
Paulo Alonso Lois REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

JIM YOUNG

El Masters comienza con la ausencia de Tiger Woods y Scott, Day y Stenson como aspirantes a conseguir el domingo el número uno del ránking

10 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Un campo irrepetible, un ceremonial singular que se vive cada segunda semana de abril y una lista de jugadores en la que abundan las leyendas convierten el Masters de Augusta en un torneo singularísimo. La liturgia del campeonato arranca esta mañana con Arnold Palmer, Gary Player y Jack Nicklaus en la salida honoraria. Pero la edición que empieza hoy (Canal + Golf, 21.00) incluye dos ausencias: en el vestuario, la del todopoderoso Tiger Woods, y en el recorrido, el mítico árbol Eisenhower de la calle 17, el pino que el expresidente era incapaz de salvar con su driver y que pidió a la directiva talar en 1956. Lo que una carta desde la Casa Blanca no logró, lo consiguió una tormenta de hielo el pasado mes de febrero al derribar el pino. El club plantó allí un nuevo ejemplar a 190 metros del tee, pero el golpe de salida ya no entraña la dificultad de antes.

Así es el Masters, un paraíso en el corazón de Georgia que sigue sus propias normas, una directiva blindada a presiones y que ha conseguido crear el mayor espectáculo del golf mundial. Cuatro españoles lo disfrutan desde hoy, Chema Olazábal (ganador en 1994 y 1999), Miguel Ángel Jiménez, Sergio García y Gonzalo Fernández-Castaño

Falta Woods, pero su ausencia ofrece también alicientes. Queda vacío el trono del golf, y tres aspirantes tienen posibilidades de ocupar el domingo el número uno mundial que, antes o después, Tiger dejará libre por su ausencia de tres o cuatro meses tras operarse en la espalda.

El australiano Adam Scott, que ya sabe lo que es sentir la la chaqueta verde sobre los hombros, lo tiene más fácil que ningún otro. Hace unas semanas ya desperdició una oportunidad para subir al trono de Woods, pero ahora, con terminar entre los tres primeros, lucirá el número uno del golf. Sería el segundo australiano en la historia en auparse a lo más alto, algo que ya consiguió Greg Norman, precisamente el eterno perdedor en Augusta, con tres segundos puestos (1986, 1987 y 1996).

Sin grandes, pero candidatos

Sin grandes todavía se encuentran los otros dos aspirantes al liderato del ránking mundial. Ganador del circuito europeo y del americano en el 2013, la regularidad impulsa a Henrik Stenson. Sería el primer sueco en lucir el número uno si acaba segundo o gana el Masters, pero arrancó el 2014 con dudas.

Tres veces segundo en un major desde el 2011, el australiano Jason Day necesita ganar el torneo para subir a lo más alto del ránking, pero arrastra molestias en la muñeca que ya le obligaron a parar un mes.

De estos tres valientes depende un nuevo paréntesis en el reinado de Woods, 678 semanas repartidas en varias etapas diferentes. El círculo se cierra con otro dato. Tiger fue número uno por primera vez en enero del 1998, cuando terminó el reinado de 331 semanas de Greg Norman, el gran tiburón blanco.